Byars y Willy, en el partido del Baloncesto Sevilla - Estudiantes. Foto: Inma Flores.
Al equipo de Scott Roth le cuesta encontrar los senderos hacia el aro. Vive en una situación precaria en el ataque a falta de 15 días para el inicio de la Liga ACB, y posiblemente le llevará algunas semanas más incorporar y ajustar los mecanismos necesarios. Logró no obstante su primer triunfo, haciendo valer una defensa notable y los centímetros de sus pívots, en los que cimentó la remontada del último cuarto tras todo un partido a remolque ante un Estudiantes al que le faltaban dos de sus fichajes, Bircevic y Nunnally.
En la primera parte ofreció un desequilibrio evidente, porque en defensa Baloncesto Sevilla sabe lo que se hace, o mejor dicho tiene claro lo que debe hacer. En ataque va improvisando, y se pone en manos del talento individual. No es menos cierto que el engranaje ofensivo necesita de un mejor conocimiento entre los jugadores. Nada que no se pueda ir resolviendo con el paso de los entrenamientos y de los partidos. Pero sí deja más dudas el rol de Xavier Thames como generador de juego. Y ayer, Roth no tenía más alternativa para la dirección que Berni Rodríguez, puesto que Nikola Radicevic, que tan buenas perspectivas ha apuntado en los dos partidos previos, no se vistió por un problema en un pie. De la capacidad de mejora del estadounidense en ese puesto clave puede depender un replanteamiento del perfil del jugador a fichar en caso de que McNeal no se incorpore. Las dificultades ofensivas, ante un Estudiantes que emplea defensas alternativas que ya de por sí pueden llevar al desconcierto, hicieron que Baloncesto Sevilla fuese a remolque. Nacho Martín por dentro y Juancho Hernangómez desde el perímetro llevaron por delante a los colegiales, que arrancaron con un 2-10 de salida aplacado por Byars con 8 puntos antes del final del primer cuarto (17-19). Balvin puso por delante a los verdirrojos (21-20), pero las lagunas frente al aro se iban sucediendo cada poco, en un partido en el que, además, no encontraba su sitio Kristaps Porzingis (2 puntos al descanso). La figura de Willy Hernangómez sí fue creciendo, en un partido especial por la circunstancia inédita de enfrentarse a su hermano.
La salida de vestuarios (29-34) no modificó mucho la escenografía hasta que los centímetros de Balvin empezaron a provocar estragos, primero en defensa, con intimidación y rebotes, y y después con dos acciones consecutivas en ataque que llevaron al marcador las tablas (40-40). Salgado puso coto al desmán local con un triple marca de la casa al que respondió Watts. Otro de Thames puso en ventaja a los locales pero Estudiantes logró iniciar el último cuarto otra vez en ventaja (48-49). Más triples. Urtasun y Berni consolidaron la primera diferencia seria (57-50), en unos minutos en los que los del San Pablo cerraban bien su aro. Estudiantes también apretó atrás y los chispazos verdirrojos se agotaron (61-59). Tres rebotes ofensivos en una misma jugada proporcionaron tres puntos decisivos desde el tiro libre al cuadro local para la resolución, que tuvo suspense porque el triple de Van Lacke que pudo arrebatar in extremis el primer triunfo llegó fuera de tiempo por centésimas.
Ficha técnica: CB Sevilla 17+12+19+18: Thames (8), Berni Rodríguez (8), Byars (12), Porzingis (11), Willy Hernangómez (8) (cinco inicial), Balvin (5), Oriola (2), Watts (5), Álex Urtasun (7).
Estudiantes 19+15+15+15: Salgado (6), Van Lacke (9), Juancho Hernangómez (11), Simpson (7), Nacho Martín (17) (cinco inicial), Jaime Fernández (8), Martínez (0), Niang (2), Rabaseda (1), Ortega (3).
Árbitros: Sánchez Monserrat, Fernández y Serrano. Eliminaron a Simpson (37?).
Incidencias: Partido homenaje al malogrado Carlos Montes, ex jugador del Baloncesto Sevilla y Estudiantes, disputado en el pabellón de Los Montecillos (Dos Hermanas) ante unos 800 espectadores.
