Un escape de gas sembró el temor entre los vecinos del Centro de Dos Hermanas. Los Bomberos recibieron ayer una alerta por riesgo de fuga en la avenida de Los Pirralos, que obligó a cortar esta vía al tráfico y evacuar a los vecinos de sus casas colindantes por espacio de dos horas. Afortunadamente, no hubo heridos.
Los hechos ocurrieron hacia las nueve de la mañana de ayer, cuando una llamada de un vecino alertó al parque de Bomberos sobre un fuerte olor a gas. Rápidamente, el Servicio de Extinción de Incendios se puso en funcionamiento para acordonar la zona y evacuar en un radio de cien metros a todos los vecinos de los inmuebles colindantes y establecimientos comerciales del lugar, desde los pisos de San Pablo hasta la calle Carlos I.
Fuentes del cuerpo de Bomberos comentaron que la actuación duró entre una hora y media y dos horas, por lo que a las 11.00 horas la calle volvía a estar abierta al tráfico.
Los efectivos municipales pudieron comprobar que la fuga de gas se había producido por la rotura de una tubería de Enagas en las obras de acometida que está realizando una promotora en un edificio de nueva construcción en la avenida Los Pirralos.
error humano. Al parecer, según las fuentes policiales, los operarios se disponían a hacer una zanja en la calle, pero no cayeron en la cuenta de que podía había una tubería de gas bajo tierra. Por eso, cuando procedieron a iniciar los trabajos, la maquinaría perforó la tubería y provocó el incidente.
Una vez que se sustituyó la tubería afectada por la rotura, los vecinos pudieron volver con toda normalidad a sus domicilios y los efectivos de la Policía Local reanudaron el tráfico rodado en la zona que, de todos modos, no sufrió atascos de relevancia.
Por otra parte, los agentes locales tuvieron que intervenir también en un accidente en el puente de subterráneo cercano al recinto ferial, que une la avenida de España con la calle Real Utrera. Al parecer se trató de un choque frontal en el que estaban implicados dos vehículos.
accidente de tráfico. Los coches colisionaron en la parte de los faros después de cruzarse en dicha curva, y a consecuencia de la velocidad a la que discurrían, realizaron un giro de unos 360 grados en el asfalto. Uno de los conductores, una mujer embarazada de la que no trascendió el nombre, sufrió heridas leves y fue atendida en el hospital, aunque la policía informó de que actualmente se encuentran en perfectas condiciones tanto ella como su futuro hijo.
En cuanto al otro conductor, los encargados de la investigación sospecharon de que podría estar conduciendo bajo los efectos del alcohol, por lo que procedieron a hacerle la pertinente prueba y este se negó a ello, razón por la cual fue denunciado por la Policía.
Según el comisario de la Policía Local, Antonio Lora, "debido al giro de los coches y a que apenas hay huellas en el asfalto, no se puede determinar con exactitud cuál de los dos turismos invadió el carril contrario al realizar la maniobra". Habrá pues que seguir investigando para depurar responsabilidades.
