Internet cuelga sus pancartas y se va de mitin. Por primera vez en una campaña, los partidos recurren al mundo virtual para captar indecisos. PSOE y PP creen que la batalla en internet es clave para el resultado final. Y, para ello, invaden los ordenadores de los españoles con mensajes, como si fueran unos hackers.
"Internet será por primera vez en la historia decisiva para resolver el empate técnico que hay entre Rajoy y Zapatero", confía el secretario de comunicación del PP, José Luis Ayllón. La creciente dependencia a internet como canal de información ha obligado a PP y PSOE a emprender una carrera electoral paralela en el mundo virtual. Desde el PSOE, se mantiene que son el partido que más ha incorporado las nuevas tecnologías a su acción política y, a la par, los populares defienden que fueron pioneros en internet.
La batalla está servida y hay hasta una guerra de trincheras, promovida por los internautas. El último capítulo fue el de la ya famosa niña de Rajoy, objeto de parodias en YouTube, aunque no es el único. También hay referencias a Super ZP o al Llamazares virtual que osa quemar una foto de la familia real. Y es que la red está sujeta a todo tipo de curiosidades, hasta que una universitaria prometa quitarse una prenda por cada disgusto en campaña. El striptease no se culminó, pero no por falta de decepciones, sino por la censura.
redes sociales. Pero no todo son burlas o chascarrillos. Los partidos se han esforzado en llegar a los consumidores potenciales de la red: los jóvenes. El PSOE, por ejemplo, lo considera prioritario, porque permite "la comunicación directa y sin intermediarios de los ciudadanos con el partido". Por eso, además del portal web -con 22.000 visitas diarias- o la página del candidato, ha distribuido su sello, como si de una pegada de carteles se tratara, en redes sociales como Facebook, Tuenti o Flickr. Hasta se han atrevido a tener su propio canal de televisión para internautas: iPsoetv.
El PP trabaja en esta línea. "Lo relevante no es contar con una gran sede (portal web), sino abrir sucursales donde se mueven los internautas", expone Ayllón, que considera que esta herramienta "permite movilizar a los simpatizantes que antes se quedaban en casa y que ahora casi forman parte del equipo de campaña" gracias a sus propuestas.
PSOE y PP están encantados cuando ven que sus webs crecen en visitas y se llenan de propues- tas -y críticas-. Pero no se quedan ahí, sino que dan el salto al servicio más popular: el blog.
El PP, consciente del influjo de la bitácora, celebró una reunión de bloggers en su convención política de 2006. Allí enseñó a sus militantes a crear un blog, que, según Ayllón, "no deja de ser una iniciativa personal de un ciudadano que se dedica a la política". Entre ellos, destacan los de Ana Pastor o Julio de Arístegui. Su rival político, el PSOE, no se queda atrás y planta cara con la Blogosfera Progresista, una comunidad con 600 blogs políticos. El más popular, sin duda, es el cuaderno de Pepe Blanco.
¿minorías? Internet no es PSOE y PP, sino el foro en el que los partidos minoritarios igualan fuerzas. Y es que la red no entiende de David y Goliat. "Al no tener medios, es la mejor manera de acercarnos al electorado", dice el responsable de Comunicación de IU, José Francisco Mendi.
Gaspi, el dibujo animado del líder de IU, Gaspar Llamazares, es su referente vitual, con el que "acerca la política con una sonrisa". La elección de la sintonía en Myspace, la llegada de Llamazares a Second Life o la posibilidad de hacerle preguntas son acciones de IU, que lidera la rebelión de las minorías en la red.
