En menos de seis horas un hombre de nacionalidad china murió acribillado a tiros en una discoteca, dos transeúntes resultaron heridos por una bala perdida y otras cuatro personas fueron acuchilladas en una reyerta. Y todo ello en Madrid.
En una zona deshabitada del Paseo de la Alameda de Osuna de Madrid, cuatro personas, tres de nacionalidad española y una rumana, resultaron la pasada madrugada heridas por arma blanca y contusiones en el transcurso de una reyerta. El suceso, informó a Efe una portavoz de Emergencias Madrid, ocurrió sobre las 3.00 horas, y, además de las cuatro personas heridas, que fueron trasladadas a hospitales de la capital bajo custodia policial, hay otra persona detenida.
Mientras, un hombre de 35 años y nacionalidad china, que recibió tres disparos de arma de fuego cuando se encontraba la pasada madrugada en una discoteca en la Avenida de Santa Eugenia de Madrid, falleció sobre las ocho de la mañana, informaron fuentes de la Jefatura Superior de Policía. El tiroteo ocurrió sobre las 5.00 horas, por causas que investiga la Policía Nacional, cuando la víctima se encontraba en dicha discoteca, frecuentada habitualmente por ciudadanos chinos. La víctima presentaba tres impactos de bala, uno en el muslo izquierdo y dos en tórax y abdomen. Los servicios de emergencia lo trasladaron al Hospital Gregorio Marañón, donde falleció.
tiro fortuito. Otras dos personas resultaron heridas de bala ayer al recibir de manera fortuita un disparo efectuado por un hombre que participaba en una pelea, según informó a Europa Press un portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid. A las 8.30 horas, dos hombres iniciaron en la calle una discusión que llegó a las manos. Uno de los dos varones propinó un puñetazo a su contrincante, quien cayó al suelo. Desde su posición, sacó una pistola con la intención de disparar al individuo que le ha- bía agredido, pero el tiro fue al aire. La bala disparada alcanzó a un hombre de 52 años que iba caminando por la calle de Luchana. El proyectil entró por la espalda del varón y salió por el abdomen. El hombre no se percató de sus heridas, por lo que continuó andando hasta que se dio cuenta de que estaba sangrando.
Sin embargo, la bala que le provocó las heridas no quedó alojada en su cuerpo y continuó su trayectoria hasta alcanzar el hombro de otra persona que paseaba por la misma calle, según fuentes de la Jefatura Superior de Policía. Este segundo herido de bala fue trasladado al Hospital Clínica donde reconoció al tirador y llamó a la Policía, que lo detuvo allí mismo.
