Tras cuatro años consecutivos, el Sevilla no realizará viajes transcontinentales este verano. La celebración de la Peace Cup, además, reporta económicamente lo que brindaban este tipo de giras, por lo que, atendiendo además a la planificación deportiva, no se realizarán grandes traslados.
Esta pretemporada no habrá giras ni asiáticas ni americanas ni europeas. Tras cuatro años consecutivos de viajes transcontinentales, de destinos exóticos y de torneos internacionales con rivales variopintos, este año todo se concentrará en España y, más concretamente, en Andalucía. El motivo no ha sido otro que la celebración de la Copa de la Paz. Tanto deportiva como económicamente (puede reportar más de dos millones de euros), este trofeo cumple las expectativas del Sevilla, que además tendrá la suerte de acogerlo como uno de los anfitriones y sin necesidad de traslados. Además, las fechas de su disputa -24 de julio al 2 de agosto- han sido habitualmente las que ha utilizado el Sevilla para realizar sus viajes más largos.
Cabía la posibilidad, en cualquier caso, de realizar alguna gira en agosto, pero en este caso, según explicó ayer el subdirector general de gestión y organización del Sevilla, Manuel Vizcaíno, no se ha querido interferir en la preparación del equipo: "Tenemos el Carranza y después además el entrenador quería preparar el inicio de la Liga con tranquilidad".
Está por ver si en años próximos se retoma la senda de las giras internacionales, pero hasta el momento el Sevilla ha tenido cuatro vivencias que no fueron mal, ni deportiva ni económicamente. En 2005, el primer año de la internacionalización de la pretemporada nervionense, el equipo ya entrenado por Juande Ramos disputó el torneo internacional Budweiser en Shanghai, en el que se enfrentó, por ejemplo, al Zaragoza y al Villarreal, además del conjunto local de la ciudad china.
Al año siguiente no abandonó Asia, pero se desplazó a Japón para disputar amistosos ante equipos como el Jubilo Iwata y Albirex Nigata.Ya en 2007, el Sevilla cambió de continente y se desplazó a los Estados Unidos, en concreto a Chicago. Allí se disputó el Chicago Trophy, torneo en el que los rivales fueron el Wisla de Cracovia y el Toluca mexicano. Por último, el año pasado, el Sevilla disputó y ganó en Moscú el trofeo de Los Ferrocarriles, y jugó el de Amsterdam (ante Inter y Arsenal).
