En un paseo por las calles de Barcelona, un utrerano presenció atónito un modelo de la empresita, restaurado con un color similar al que lucía hace años en Utrera, circulando por la ciudad condal. Y es que la Asociación para la Recuperación y Conservación de los Autobuses (ARCA), que se dedica a la preservación de vehículos históricos y a la organización de exhibiciones con los mismos, se ha hecho con varios ejemplares de los coches pertenecientes a la empresa Autocares Barrera.
Como explica el secretario general de dicho colectivo, José María Martínez, tuvo conocimiento de la existencia de la empresita a través de un reportaje publicado por este periódico, que hablaba por aquel entonces de la finalización del servicio por el casco urbano. Rápidamente, contactó con el Consistorio para llevar a cabo la compra de esos autobuses a fin de preservarlos en buen estado y mantenerlos en circulación.
"Hoy día ya no funcionan autobuses como éstos", afirma Martínez, que admite que "son los modelos originales, que han sabido conservarlos y están en perfecto estado". Se refiere a las dos empresitas -de los modelos Sava 5701 y Sava-Pegaso 5720- que están en Barcelona y que halló en "perfecto estado" antes de su adquisición. "No tenían ningún problema de motor, sólo algunos desperfectos en la chapa sin importancia", señala, al tiempo que destaca el trabajo de conservación realizado por los hermanos Barrera, que "han sabido mantener los vehículos bajo techo para favorecer su buen mantenimiento".
Una vez allí, la asociación restauró los vehículos y recuperó sus colores originales. Barcelona disfruta así del más antiguo de los autocares utreranos, adquirido en 1972; y otro que, antes de ir a Utrera, circuló por Sevilla. ARCA ha celebrado incluso una muestra para exhibir los distintos modelos que conservan, que pasearon por la ciudad condal.
