Fernando Verdasco recuperó parte de las sensaciones que tenía guardas de su intervención el año pasado en el Abierto de Australia, donde alcanzó las semifinales, y encabezó una lista de seis españoles que brillaron en la segunda jornada, en la que Marcel Granollers propició la derrota más importante del torneo, la del sueco Robin Soderling.
La lluviosa primera jornada dio paso a otra en la que los paraguas fueron guardados y volvió a lucir el sol, y en la que las pistas se vieron saturadas para volver a la regularidad que marca el calendario del torneo.
Verdasco ha cuidado al máximo su regreso a Melbourne, donde el año pasado logró por primera vez las semifinales de un grande. Aquí entró a formar parte del grupo de los diez primeros del mundo, y su formidable partido ante Rafael Nadal le catapultó mucho más internacionalmente.
En su regreso, y después de hacerse con la victoria en la exhibición de Kooyong, el madrileño fue precavido pues sabe que defiende 720 puntos, pero venció al australiano Carten Ball, 129 del mundo y con invitación especial, por 7-6 (1), 7-5 y 6-2 en tres horas y cinco minutos.
El madrileño admitió que saltó a la pista algo preocupado. "Los partidos de primera ronda son siempre diferentes. Los tienes que ganar sí o sí. Yo he tenido esa presión porque aquí se deja uno todo para ganar", expresó Verdasco después de invertir tres horas y cinco minutos en doblegar al gigante australiano, que llegó a conectar 13 saques directos, y presentó una dura batalla, especialmente por la velocidad de su saque, con el que alcanzó 219 kilómetros por hora.
"Hoy tenía un jugador complicado: jugaba en casa, jugaba desde el principio muy agresivo con un saque increíble y no me daba casi nada de ritmo. Ha sido de los peores jugadores de primera ronda que me podía tocar. Pero al final he podido sacarlo adelante y contento de haber ganado", dijo Verdasco, que se siente como en casa en Melbourne Park, donde se ha entrenado desde la pasada semana, aunque jugase luego en Kooyong.
"Me encuentro igual de bien que el año pasado y las sensaciones están en mi cabeza y me hacen dar más de mi. Tengo la confianza de que puedo hacer lo mismo del año pasado, e incluso más".
Marcel Granollers también está en una nube. Su victoria sobre el sueco Robin Soderling, octavo cabeza de serie, levantando dos sets y ganando por 5-7, 2-6, 6-4, 6-4 y 6-2, fue considerada por el barcelonés como la mejor de su carrera.
Soderling, finalista de Roland Garros la pasada temporada, había tenido problemas en el codo en Kooyong, pero contaba entre los favoritos, y dominó hasta que el barcelonés encontró su juego.
Marcel acabó el partido como pudo, no obstante. Con 4-1 en el último parcial tuvo que llamar dos veces al fisioterapeuta, debido a unos problemas en el cuádriceps derecho. Pero a las tres horas y 21 minutos pudo levantar los brazos en signo de victoria.
Su triunfo tiene más mérito si se tiene en cuenta que viaja sin entrenador desde que rompió con Galo Blanco a final de año, aunque aquí se ve apoyado por sus amigos Santiago Ventura y Marc López.
También se colocaron en segunda ronda Feliciano López, al vencer al uruguayo Pablo Cuevas, un jugador que se fracturó la muñeca el martes pasado en Sydney y fue operado el jueves, y tuvo la valentía de jugar hoy aunque perdió por 6-1, 6-4 y 7-5.
David Ferrer, que se benefició de la lesión de rodilla del portugués Frederico Gil para ganar por 6-0, 6-0 y 2-0 y retirada, y Albert Montañés, que también avanzó ante Oscar Hernández, lesionado en la espalda y que paró cuando perdía por 7-6 (5) y 2-2, estuvieron entre los más fuertes, grupo que alcanzó también Nicolás Almagro al vencer al belga Xavier Malisse, por 7-6 (12), 6-4, 2-6 y 8-6.
Carla Suárez, cuarto finalista el pasado año aquí, superó a la japonesa Ayumi Morita por 7-5 y 6-4. En la pasada campaña dio la gran sorpresa al vencer a Venus Williams, y de vencer el jueves su próximo partido ante la alemana Andrea Petkovic, podría darse el gusto de luchar contra la defensora del título, Serena Williams.
Además de Oscar Hernández, fueron eliminados Guillermo García López, ante el suizo Stanislas Wawrinka, Carlos Moyá con el ucraniano Illya Marchenko, Juan Carlos Ferrero, que llegó ya lesionado en el tobillo derecho desde Auckland y acabó con problemas en la rodilla izquierda ante el croata Ivan Dodig, David Gimeno Traver, con el serbio Novak Djokovic, y la más importante la de Tommy Robredo, favorito 16, ante el colombiano Santiago Giraldo.
En el cuadro femenino la valenciana Anabel Medina, que venía de lograr las semifinales en Hobart, cayó ante la croata Karolina Sprem, por 6-3 y 6-2, y Arantxa Parra con la austríaca Sybille Bammer, por idéntico resultado.
