La depresión también mata

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07 abr 2017 / 22:16 h - Actualizado: 07 abr 2017 / 22:16 h.

Murieron grandes por depresión: Ernest Hemingway, Vincent Van Gogh, Janis Joplin, Virginia Woolf, Marilyn Monroe, Elvis Presley... Se les lloró. Pero la tragedia es que mar adentro hay cifras sobre anónimos, informándonos que el suicidio es la segunda causa de muerte juvenil, la depresión la primera causa de enfermedad entre los adolescentes, y el número de suicidios tiene una subida del 20% desde el inicio de la crisis económica, además cada día 10 personas se quitan la vida, y es la primera causa de muerte no natural, lo que duplica la cifra de las muertes por accidentes de tráfico.

No oigo hablar de este tema a quienes disponen de tribunas. La depresión está considera como una enfermedad vergonzante, está clandestinizada. Pides permiso para acompañar a tu marido al oncólogo, pero jamás al psiquiatra. Esta enfermedad de la tristeza, la desesperación y la angustia afectó globalmente a más de 322 millones de personas, lo que equivale al 4,4 % de la población mundial, y en el caso de España, al 5,2 % de la población. ¿Cómo es que tener esta enfermedad está considerado como un lujo? ¡Si está reconocida por OMS como de alto riesgo porque si no es tratada adecuadamente puede ser la antesala del suicidio!

Las últimas investigaciones plantean que el 25% de jóvenes con alto riesgo de padecer depresión tienen en común factores como el bajo nivel educativo, la pobreza y la exposición a violencia. Ser víctima o testigo de un acto de violencia de género, o bullying son algunas de las causas que puede desencadenar un trauma.

Se están perpetuando los prejuicios y conductas discriminatorias hacia las personas que padecen depresión, no se les reconoce la enfermedad, se la invisibiliza y no se la trata, y luego es demasiado tarde para intervenir. Pero cuidado, hay una cascada de datos demoledores: en 1955 había 355.000 personas en hospitales con un diagnóstico psiquiátrico; en 1987, 11250.000 personas recibían pensiones en EEUU por discapacidad debida a enfermedad mental; en 2007 eran cuatro millones. El año pasado, cinco millones. ¿Qué se está haciendo rematadamente mal en estas sociedades? ~