Muchas veces hemos escuchado decir que si los pensionistas se juntaran echarían abajo al gobierno más fuerte. Se han juntado y es impresionante, hasta bajo la lluvia, como en Sevilla, porque han dicho basta. Primero las mujeres, en un día histórico para nuestro país, y ahora los pensionistas, que no están haciendo sino reclamando lo que les pertenece por haber estado cotizando, es decir, pagando su jubilación, algunos durante medio siglo. ¿Serán capaces de echar abajo al Gobierno? Lo dudo, porque los que están bien de memoria saben lo que hicieron los anteriores gobiernos y lo que podrían hacer esos que quieren sacar rédito político de nuestros mayores, los que sufrieron quizá la España más dura de la historia. Mi madre votó siempre a Felipe González, a pesar de que cuando pudo arreglar la paga de viudedad, en su mandato, solo cobraba 52 euros al mes por mi padre, un jornalero de Arahal que murió molido a los 33 años. Creo que solo le han dado un toque a Rajoy, pero que en las urnas no habrá un castigo severo porque el recambio no está nada claro.