El juicio por el incendio en Las Moreras llega tras diez años

Un fuego con seis muertos en una casa en 2008 derivó en ataques a los bomberos que intervinieron

09 may 2018 / 08:30 h - Actualizado: 08 may 2018 / 22:13 h.
"Sucesos","Bomberos"
  • El camión de bomberos que fue víctima de los ataques en primavera de 2008. / Efe
    El camión de bomberos que fue víctima de los ataques en primavera de 2008. / Efe

Los días 9 y 10 de mayo está previsto celebrar en el Juzgado de lo Penal número 15 de Sevilla el juicio por las lesiones sufridas por los bomberos de Écija tras el incendio en que murieron seis personas en la calle Haya de Écija, en abril de 2008. La vista ha sufrido tres suspensiones, la última en noviembre de 2016, que la llevan a celebrarse más de diez años después de estos sucesos.

En la mañana del 20 de abril de 2008, un grupo de vecinos acometieron el camión de bomberos que intervino en el incendio de una casa de Écija en la calle Haya, en la barriada de Las Moreras, en la que murieron seis miembros de la misma familia, indignados por la tardanza con la que creían que actuaron los bomberos. El incidente se produjo poco después de las 12.15 horas, tras ser sacados de la casa e introducidos en coches fúnebres los restos de los fallecidos, después de que agentes de la policía científica efectuaran su labor en la vivienda y el juez ordenara su levantamiento.

Alrededor de mil vecinos se concentraron frente a la vivienda siniestrada en Écija consternados por lo ocurrido, pensando que había habido demora de los bomberos. La Fiscalía de Sevilla pide más de dos años de prisión para cada uno de los 15 acusados por su conducta con los bomberos en los incidentes ocurridos cuando éstos acudieron a sofocar el fuego en la casa de la familia de la tragedia. También pide 2.400 euros de multa individualmente a los encartados.

El abogado Fernando Osuna, que defiende a algunos de los acusados de agredir a los bomberos, asegura que sus defendidos «se vieron dominados por la rabia, la pena y el dolor, al ver como sus vecinos ardían con su casa sin poder escapar a causa de las verjas que cubrían las ventanas». «Ante la impotencia de la situación, parte de los allí presentes perdieron el control, alzándose contra los bomberos, que no pudieron hacer nada por la vida de estas personas», señala el letrado, que asume y prepara la defensa de algunos de estos acusados de cara a la futura vista.

Osuna afirma que ha estado en contacto con especialistas en salud mental «para poder determinar el estado psicológico de los inculpados en que se encontraban en el momento de los hechos”, y que va a alegar “intensa alteración psíquica» ante la acusación por los incidentes con los bomberos.

«Con el impacto de los seis fallecimientos y la creencia del retraso de los bomberos, se produjo un estado emocional incontrolado en los acusados», apunta Osuna, para quien «tiene gran importancia hacer una valoración global de la personalidad, a través de pruebas estandarizadas y entrevistas personales a fin de conocer el estado psíquico de los acusados en el momento de los hechos por los que van a ser juzgados».

El abogado considera que «en estos casos, por la psicosis que se padece y durante esa situación de estrés muy aguda, se pierde el control sobre sí mismo, y el dominio de los actos es nulo». La actuación de los vecinos partícipes en los incidentes “estuvo muy mediatizada por circunstancias en las que la voluntad y el conocimiento de la realidad estaban muy distorsionados», opina Osuna, de ahí que vaya a pedir la libre absolución para sus clientes y, para el caso de que no se estime esta petición, se solicitará que se rebaje considerablemente la pena «por haber atenuantes».