Ayer se selló el convenio urbanístico de colaboración que permite el desbloqueo de los suelos de la antigua fábrica de vidrio La Trinidad, ubicados entre la Ronda de Capuchinos y Carretera de Carmona. Tras una década de desencuentros, el desarrollo de la zona será posible gracias al acuerdo alcanzado entre todas las partes que dará nueva vida a los edificios fabriles que dejaron de tener actividad en 1999.

El convenio destina unos 27.000 metros cuadrados para la construcción de unas 200 nuevas viviendas de renta libre, aunque una vez aprobada la modificación del Plan Especial de Reforma Interior, la Junta de Compensación podrá solicitar un incremento de la densidad de viviendas entre el 15 y el 20 por ciento. Igualmente, contempla que el Ayuntamiento reciba 1.400 metros cuadrados de edificios del recinto con valor «patrimonial», es decir los espacios protegidos –tanto la fábrica principal como las tres naves auxiliares–, además de unos 14.000 metros cuadrados que se destinarán a zonas verdes. Además, la junta de compensación tendrá la obligación de acometer obras de consolidación de los inmuebles de la antigua fábrica así como del entorno, con independencia de los avances que se realicen en el desarrollo de las viviendas.

Tras este acuerdo, el próximo viernes la Junta de Gobierno aprobará de forma provisional el Plan Especial y se iniciarán los trabajos que tendrán como primera prioridad las obras de consolidación de los inmuebles protegidos, que serán ejecutadas por los propietarios y que deben comenzar entre finales de este año y principios de 2019.