Tres atropellos en tan solo cuatro días

Un nuevo atropello tuvo lugar ayer en Sevilla. Con este suman ya tres accidentes de estas características los que han tenido lugar en la provincia en tan solo cuatro días. El de ayer fue mortal, mientras que los dos anteriores, uno el viernes y otro el sábado, se saldaron en un principio con heridos de gravedad, aunque ayer uno de los arrollados el sábado falleció en el hospital Virgen del Rocío. Además, ambos tuvieron otro denominador común: los conductores se dieron a la fuga, aunque posteriormente fueron detenidos.

En el siniestro ocurrido ayer las circunstancias fueron diferentes, el peatón arrollado iba caminando por la SE-30 y fue alcanzado por un vehículo en la salida 20B, pasado el puente del Alamillo, en el término municipal de Camas, según informaron fuentes del 112. El Servicio de Emergencias Sanitarias recibió el aviso del incidente sobre las 6.45 horas e inmediatamente se alertó del atropello a la Guardia Civil y a los servicios sanitarios, que solo pudieron confirmar el fallecimiento del peatón.

Las mismas fuentes indicaron que se desconocen los motivos por los cuales el hombre, del que se desconoce su filiación, estaba caminando por la mediana de la SE-30, una zona prohibida para los peatones.

Fuentes de la Guardia Civil, cuerpo que se ha hecho cargo de la investigación, señalaron que el fallecido, de entre 30 y 40 años, circulaba sin ningún tipo de elemento reflectante por la SE-30, por lo que era muy difícil poder verle a esa hora de la mañana. Recalcaron que el conductor implicado en el accidente se dirigía a su trabajo y fue él el que alertó del suceso a los servicios de emergencia. Además, el hombre tuvo que ser atendido por sufrir un ataque de ansiedad tras atropellar al viandante, que fue trasladado al Anatómico Forense de Sevilla.

Los atropellos del viernes y del sábado tuvieron condicionantes muy diferentes. En el del viernes un conductor arrolló a un peatón en la calle Luis de Morales, a la altura del centro comercial Nervión Plaza. El conductor abandonó el vehículo que conducía de alta gama y que había empotrado en la mediana de la vía y se dio a la fuga a pie. El accidente ocurrió sobre las 6.15 de la mañana del viernes y el huido fue detenido en un municipio del Aljarafe.

La víctima, un hombre de 40 años, fue trasladado al hospital Virgen del Rocío, donde fue intervenido por fracturas en las piernas y traumatismos graves en el tórax.

El otro siniestro, el del sábado, tuvo lugar sobre las 23.30 horas en Sevilla Este. Un joven de 25 años que triplicaba la tasa de alcohol máxima permitida fue el responsable del atropello a un hombre de 59 años y a su hijo de 38, a los que se les tuvo que seccionar sendos pies, el padre falleció ayer, mientras que el hijo sigue grave. Este conductor también se dio a la fuga, pero fue localizado a los pocos minutos en las inmediaciones del accidente.

A raíz de estos dos casos, el concejal de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores del Ayuntamientos de Sevilla, Juan Carlos Cabrera, pidió a los conductores un ejercicio de responsabilidad, «que tienen la obligación de atender a las personas afectadas y lesionadas». Asimismo, recalcó que no se puede conducir bajo los efectos del alcohol.

Si el año ha comenzado con tres atropellos, uno de ellos mortales, el final de 2016 no fue mejor.

El 4 de diciembre un conductor ebrio y drogado atropelló a un ciclista en la avenida Montes Sierra. En esta ocasión, el ciclista, Francisco Javier Cabeza, de 37 años, cruzaba por un paso de peatones. Este resultó herido muy grave y murió horas después en el hospital Virgen del Rocío.

Pocos días después, el día 7, un hombre de 57 años de edad falleció tras ser atropellado por una furgoneta de reparto de pan en el polígono industrial Hytasa de la capital hispalense. En este caso el conductor, que no se dio a la fuga, dio negativo en las pruebas de alcoholemia y droga. El peatón cruzaba la calle por una zona en la que no había paso de peatones.

Este caso, al igual que el de ayer de Camas, apuntan a una imprudencia de los peatones, por ello las autoridades no dejan de hacer llamamientos tanto a la precaución de los viandantes como a la de los conductores.