Una semana. Eso es exactamente lo que ha durado la prohibición expresa de la Inspección de Trabajo, ejecutada por el Ayuntamiento de Sevilla, que impedía a los conductores de Tussam subir o bajar pasajeros en las paradas de autobuses situadas en las calles Luis Ortiz Muñoz, Padre José Sebastián Bandarán y Madre de Cristo en el Polígono Sur. A partir de este miércoles 6 de diciembre, los vehículos de las líneas 31 y 32 recuperarán sus paradas habituales en el barrio, toda vez que el Consistorio hispalense ha garantizado que se llevará a cabo un plan de seguridad preventivo -tal y como reclamaba la Inspección- que evite, entre otros aspectos, que vuelvan a reproducirse los incidentes de apedreamientos de autobuses que habían tenido lugar en el Polígono Sur durante las últimas semanas.
El informe presentado por la Inspección Técnica de Trabajo el pasado 29 de noviembre reflejaba que la prohibición de la actividad laboral de los trabajadores de Tussam en esa zona se llevaría a efecto “hasta que quede garantizada la implantación de medidas preventivas efectivas frente al riesgo de golpes o impactos por apedreamiento”. Entre estas medidas, el Ayuntamiento señala que se mantendrá un dispostivo policial entorno a los autobuses de Tussam que evite estos incidentes y que, en caso de volver a producirse, permite identificar a los autores de los mismos, como ya ocurriera con anterioridad.