Turismo

El Parlamento rechaza la tasa turística en un pleno de bronca con Bernal

La izquierda, que admite que "no va a solucionar todos los problemas" del turismo, vota a favor y pide que se tomen medidas al respecto

El consejero de Turismo, Arturo Bernal, sigue en su escaño el pleno del Parlamento el debate sobre la tasa turística de Andalucía.

El consejero de Turismo, Arturo Bernal, sigue en su escaño el pleno del Parlamento el debate sobre la tasa turística de Andalucía. / Julio Munoz / Efe

Victoria Flores

Victoria Flores

El PP ha tumbado este miércoles la posibilidad de que Andalucía tenga una tasa turística como pide la izquierda. La mayoría absoluta de la que goza el presidente de la Junta, Juanma Moreno, no ha dado opciones a Adelante Andalucía de desarrollar este impuesto para quienes visiten la comunidad autónoma y su grupo ha asegurado que han "venido a bajar los impuestos".

El turismo es una actividad básica para la economía andaluza. La comunidad autónoma recibió en 2023 35 millones de visitantes, una cifra que, según las llegadas que ha habido hasta el momento, se espera que crezca este año. El sector genera el 13,5% del PIB del territorio y da trabajo a millones de andaluces, pero en las últimas semanas se han multiplicado las manifestaciones contra sus impactos negativos en las capitales andaluzas.

Los debates sobre turismo han generado alguno de los momentos más tensos de la jornada este miércoles en la Cámara. Poco antes de hablar de la tasa turística, el presidente del Parlamento, Jesús Aguirre, ha tenido que interrumpir la sesión por un rifirrafe entre el consejero de Turismo, Arturo Bernal, y los diputados socialistas. En su discurso el popular ha señalado que "a nadie de la bancada de la izquierda le importa un pito", algo que ha desencadenado el enfado del PSOE. "Te aguanto todos los días detrás de mi cabeza y das mucha vergüenza", ha criticado Bernal a la portavoz socialista, Ángeles Férriz, a lo que le ha contestado: "¡Vergüenza das tú!".

Adelante Andalucía presentó la proposición de ley hace siete meses y llevaba desde entonces pidiendo que se incluyera en el debate parlamentario. Su líder, José Ignacio García, ha recordado que en este tiempo el Consejo de Gobierno no ha realizado ninguna valoración al respecto.

La izquierda admite que no es la "solución" a todos los problemas

"La tasa turística llegará a Andalucía, hoy no, pero la veremos", ha sentenciado García. El andalucista ha denunciado que el turismo "descansa en la idea de que en Andalucía se pueden obtener enormes beneficios gracias a una mano de obra barata" y ha enumerado los problemas que provoca como la "pérdida poder adquisitivo e impacto climático o social". "¿Quién va a pagar todos estos problemas?", se ha preguntado para admitir que la tasa no es la solución definitiva, pero "permite recaudar dinero para afrontar las políticas necesarias contra un modelo turístico negativo".

En concreto la formación propone tarifas que van desde los 0,75 céntimos para quien pernocte en un hostal hasta los cinco euros para quien lo haga en un crucero. Estos precios dependen del impacto climático del tipo de residencia turística y del poder adquisitivo del visitante. El fin del dinero recaudado, que los andalucistas estiman en 220 millones euros al año se dedicaría al desarrollo de un parque de vivienda pública y a políticas que luchen contra el cambio climático generado por el turismo.

Por Andalucía y el PSOE han votado a favor de la propuesta a pesar de señalar que "no va a solucionar todos los problemas". La socialista Isabel Aguilera ha resaltado que Arturo Bernal es "el primer consejero de Turismo contra el que se manifiesta la población" y ha pedido al Gobierno que no se "tape los oídos", evite los "argumentos infantiles" y actúe. Además, la diputada de Por Andalucía Esperanza Gómez ha lamentado que "el turismo genera externalidades negativas" y frente a las cifras positivas que suele presentar Bernal, le ha exigido al consejero que aporte "datos de cuantas habitaciones limpia una camarera de piso".

La derecha rechaza la tasa

El PP ha votado en bloque que no, pese a que dentro de la formación, incluso dentro del propio Gobierno de la Junta, existen posturas enfrentadas respecto a este impuesto. Alcaldes populares como Francisco de la Torre, de Málaga, o José Luis Sanz, de Sevilla, y consejeros como la de Hacienda, Carolina España, han pedido en numerosas ocasiones al Ejecutivo de Moreno que regulen este pago, pero el presidente andaluz y el consejero de Turismo se han negado una y otra vez.

Los populares han relacionado la tasa con la financiación autonómica y ha denunciado que la "desigualdad se está institucionalizando" y han añadido una queja contra la financiación local. "Juanma Moreno ha venido a bajar los impuestos a los andaluces", ha declarado el popular Javier Oblaré y ha añadido que esta tasa afectaría a millones de andaluces. El diputado, que ha asegurado que Andalucía es "una comunidad que vive del turismo", ha acusado de "turismofobia" a la formación andalucista por proponer la tasa. "Es verdad que hay capitales muy saturadas y por eso se ha puesto en marcha el Observatorio", ha admitido y ha diferenciado el "turismo masivo" que desarrollaban los socialistas con el de "calidad" que buscan ellos.

Vox, que ha tildado la tasa de "impuesto encubierta" -palabra que se incluye en el propio título de la ley-, se ha sumado al PP en su voto negativo. El diputado Antonio Sevilla ha admitido "potencial efecto negativo" que puede provocar el sector, pero ha dudado de que esta sea "la mejor manera". "Podríamos explorar alternativas más efectivas", ha defendido a la par que ha pedido una "regulación homogeneizada de la vivienda de uso turístico" en España.