Tarek, el joven que quería ser Lamine Yamal: "¿Sabéis cuál era mi sueño con 12 años? Ser futbolista o policía"

"Ahí tienes la puerta y la maleta. Búscate la vida", así describe Tarek Ed Zarrad, un joven marroquí extutelado de la Junta de Andalucía, lo que le ocurrió al cumplir la mayoría de edad en un centro de menores. Tarek, que quería ser futbolista o policía, y ahora juega en un equipo en el pueblo donde reside en Jaén, ha prestado su testimonio en la comisión Infancia y Adolescencia de este martes en el Parlamento de Andalucía, invitado por la asociación Poblado Mundo.

Según este chico, que actualmente trabaja en un centro de día y vive con su pareja: "Para conseguir mis sueños decidí salir de mi país, dejar a mi familia y amigos. En definitiva, dejar lo que más quería en el mundo", ha relatado. Su periplo comenzó con doce años, en los bajos de un camión agarrado a "un hierro redondo", "haciendo mucha fuerza para no caerme".

Andalucía insiste en que necesita más recursos para atender a los menores migrantes que acoge "a pulmón"

Su periplo comenzó con doce años, en los bajos de un camión, agarrado a "un hierro redondo, haciendo mucha fuerza para no caerme" desde Ceuta hasta Algeciras

"Soy un claro ejemplo de una persona integrada en esta sociedad"

Con 18 años, cuando se agotó el tiempo de tutela de la comunidad autónoma, reconoce que se sintió muy solo: "todo lo que soñé de un día a otro se fue". Ese niño, que quería ser futbolista, como tantos otros niños migrantes, con los referentes inmediatos en los actuales campeones de Europa, Lamine Yamal y Nico Williams, comparte historia de superación familiar y sueños de vida. Sus palabras han terminado con un contundente "soy un claro ejemplo de una persona integrada en esta sociedad".

Antes de criminalizarlos, algunos deberían mirar dónde tienen el corazón

María Márquez

— parlamentaria del Grupo Socialista

La parlamentaria socialista, María Márquez, ha compartido un fragmento de su emocionante intervención en la red social X. "Es imposible no emocionarse al escucharlo", ha añadido al vídeo. "Antes de criminalizarlos, algunos deberían mirar dónde tienen el corazón", ha añadido.

Este joven migrante ha estado presente en la comisión parlamentaria de la mano de una de las asociaciones invitadas a la Cámara baja, en la misma sesión en la que el Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, ha presentado el informe de la gestión realizada en el año 2023 en materia de menores.

En un día, marcado por el cruce de reproches entre la ministra de Infancia y Juventud, Sira Rego, y la consejera de Inclusión Social del Gobierno andaluz, Loles López, respecto a la acogida de menores que migran solos, Maeztu ha insistido en la necesidad de atender a los niños, menores, migrantes y sin referencias familiares, primando el interés superior del menor.

Jesús Maeztu: "No es una protección voluntaria"

La Junta de Andalucía lleva meses alertando que están llegando menores desde Canarias como si fueran mayores de edad, la cifra ya supera los 450 a la espera de nuevos dictámenes de la Fiscalía. Ante esta situación, en una entrevista en La Ser, la ministra ha sostenido que responde a casos puntuales: "Si eso ocurre se trata de casos excepcionales, dada la complejidad de concretar la edad en determinadas franjas". La consejera andaluza responsable de estas competencias, respondiéndole, ha afirmado que el Gobierno "quiere tapar esa realidad".

No es una protección voluntaria, es obligada, porque así lo establece la legislación nacional e internacional

Jesús Maeztu

— Defensor del Pueblo Andaluz

Con este contexto, el Defensor del Pueblo Andaluz, ha recalcado que "no es una protección voluntaria, es obligada, porque así lo establece la legislación nacional e internacional", ha manifestado, en plena polémica por la reforma de la Ley de Extranjería, una propuesta del Gobierno (pactada con Canarias) que no convence a la mayoría de las comunidades autónomas.

Un 15% más de quejas y consultas que en 2022

En su intervención, Maeztu ha puesto el acento este año 2023 en la infancia en situación de riesgo. Situaciones que, "no alcanzan la entidad, intensidad o persistencia que fundamentarían su declaración de situación de desamparo", pero en la que "sí es preciso la intervención de la administración pública competente para eliminar, reducir o compensar las dificultades o inadaptación que le afectan, y evitar su exclusión social, sin tener que ser separado de su entorno familiar".

En cuanto al número total de actuaciones tramitadas en 2023, se ha elevado a 5.728, lo que representa un 15% más que en 2022, de las cuales 2.762 se refieren a quejas y 2.966 a consultas.

Durante su investigación, la Defensoría ha detectado que las medidas preventivas "no siempre son suficientes o, en su caso, no llegan a todas las personas menores de edad y familias que las demandan".