Gloria, natural de El Pedroso, y Ulises, su marido, luchan para evitar que el pequeño que acogieron hace dos años en Lanzarote sea dado en adopción. Han solicitado la acogida permanente, que permitiría el contacto del menor con la madre biológica pero les ha sido denegada. Llevarán el caso a la justicia y no descartan recurrir a los tribunales europeos si hiciera falta.