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Los guitarristas que participarán en el ciclo posan junto al director de la Bienal, Antonio Zoido, ayer tras la rueda de prensa. / Manuel Gómez
«Es una buena noticia para la guitarra y para el flamenco. Hacía falta algo así en la Bienal». Son palabras de Alfredo Lagos, pronunciadas ayer tras la presentación a la prensa de El templo de las seis cuerdas, el ciclo dedicado a este instrumento que tendrá lugar en el marco de la XX Bienal de Flamenco.
El Espacio Turina será así en la sede de la guitarra durante el mes de septiembre en Sevilla. El propio director del certamen, Antonio Zoido, presentó ayer el programa en el Museo de la Guitarra, especificando que comprenderá seis conciertos protagonizados por otros tantos guitarristas: Alfredo Lagos, Pedro María Peña, Rafael Rodríguez, David Carmona, Paco Jarana y Santiago Lara.
Según la organización, el ciclo que se desarrollará en El templo de las seis cuerdas está diseñado «para otorgar un lugar especial en el tiempo y en el espacio a la prolífica y valiosa creación guitarrística de hoy en su vertiente flamenca, en la que es posible localizar algunos de los intérpretes más virtuosos de este instrumento», afirman. Así pues, en el escenario del Espacio Turina, el 13 de septiembre Paco Jarana interpretará Flamencorio, un recital muy personal al que dará vida junto al también guitarrista Manuel de la Luz, Antonio Coronel y Rafael Heredia en la percusión y Oruco a las palmas.
Le seguirá Alfredo Lagos el día 14 de septiembre presentando su espectáculo Sonanta Club, donde plantea un recorrido por las músicas de su vida desde su espíritu flamenco, «versiones de temas que me han gustado siempre, y aunque algunos no tengan que ver con el flamenco, les he aportado mi punto de vista», afirmó. Estará acompañado de un versátil grupo compuesto por Guillermo McGuill a la batería, José Atero a la guitarra eléctrica y acústica y Antonio Corrales al contrabajo.
Por su parte, el guitarrista Rafael Rodríguez interpretará el 20 de septiembre Dejándome llevar, donde se acompañará de los vientos de Diego Villegas, la batería de Isa Rodríguez, la percusión de Roberto Jaén y el violín de Alexis Lefevre. «Incluiré una parte un poco hippie, a mi aire», adelantó el músico en la rueda de prensa. «También me gustaría improvisar, veremos qué sale».
El 15 de septiembre será el turno de Pedro María Peña, quien tras casi toda una vida dedicada a la dirección escénica, musical, producción y discográfica, da un paso en su carrera artística y nos presenta Paseo de las Delicias, su ópera prima como compositor y guitarrista solista, en un concierto donde estará acompañado del violinista Faiçal Kourrich y la cantaora Anabel Valencia como artistas invitados, además de por Tete Peña en las percusiones y Sergio Aguilera y Pedrito Peña, su hijo, en coros y palmas.
«Por mis inquietudes, he pasado por todas las facetas del género», recordaba. «Empecé como guitarrista de la mano de mi padre, Pedro Peña. «Acompañé a tío Juan, el Lebrijano, me dediqué a la producción, y ahora esto es un paso más, siempre alrededor del flamenco y de la guitarra. Nunca he dejado de tocar y de componer, y la revisión de vivencias maravillosas que he vivido ha traído esta propuesta».
Un día más tarde, 21 de septiembre, el joven virtuoso David Carmona presentará en concierto su primer disco Un sueño de locura, donde compartirá escenario con el también guitarrista Óscar Zoilo, la cantaora Carmen Molina, el percusionista Agustín Diassera, Los Mellis al compás y el cantaor Luis El Zambo, como artista invitado. «Tenía 7 años cuando empezó este sueño», recordó el músico. «La locura viene de todos estos años de compromiso con la guitarra, de la angustia de la creación hasta que llega, como por gracia divina, un motivo».
Para completar y cerrar el ciclo, Santiago Lara mostrará el 22 de septiembre Una guitarra de dos caras, un recital «que llevaba tiempo queriendo mostrar» en el que se podrá disfrutar de toda su versatilidad artística incluyendo. «junto a versiones de Manolo Sanlúcar y Sabicas» parte de su Flamenco tribute to Pat Metheny, «inédito en Sevilla», con el acompañamiento de Miguel López Lenon al piano, la percusión de Perico Navarro, el bajo eléctrico de Ignacio Cintado, las palmas y percusión de Faé Ramos, y las palmas de Javier Peña.