Una mirada masculina para retratar a la mujer maltratada

El escritor Juan Manuel Márquez ha presentado en ‘Las Estación de las Letras’ de La Rinconada ‘Las huellas dejadas’, ficción plena de realidad sobre la violencia de género

28 abr 2021 / 08:54 h - Actualizado: 28 abr 2021 / 09:02 h.
  • Juan Manuel Márquez, autor de ‘Las huellas dejadas’
    Juan Manuel Márquez, autor de ‘Las huellas dejadas’

Un hombre en la última fase de una enfermedad terminal, una hija que no quiere acompañarlo en sus últimos momentos y una madre que le lee la carta que la anterior le escribe. Ese es, a grandes rasgos, el argumento de la novela de Juan Manuel Márquez presentada este martes en ‘La Estación de las Letras’ de La Rinconada. Una historia que, lejos de pintar a una hija cruel como pudiese aventurar el somero adelanto, retrata las huellas y las secuelas que un maltratador ha dejado en madre e hija y la liberación de ambas en la exposición de su sufrimiento.

Nuevamente la feria del libro recala en el centro cívico Los Silos, en esta ocasión con un escritor oriundo de Lora del Río pero afincado en La Rinconada, y con su novela ‘Las huellas dejadas’, que supone “una mirada masculina para retratar a la mujer maltratada”, según destacó la concejala y diputada provincial Trinidad Argota al presentar al autor. Una obra pequeña en extensión pero grande en contenido y mensaje, que relata sin restar dureza, aunque con una delicadeza contenida, la violencia y los abusos que sufren la protagonista y su madre por parte de su padre y marido, respectivamente.

Una mirada masculina para retratar a la mujer maltratada
El acto de presentación de la novela estuvo conducido por la periodista Pepa Violeta.

Premio de novela corta ‘Gabriel Sijé’

La novela resultó ganadora – entre un total de 566 obras presentadas – en la edición número 39 del premio de novela corta ‘Gabriel Sijé’, convocado por la Fundación Caja Mediterráneo. Sin embargo, al no publicarla la entidad, fue la editorial DonBuk, de La Rinconada, la que la ha llevado hasta los lectores. Y tras un año de pandemia, ha podido ser presentada, ante un público que ya ha conseguido desentrañarla y apostar por su mensaje de igualdad y superación.

La presentación de esta novela – en un acto dirigido por la periodista María José Jiménez Flor, Pepa Violeta – ha introducido también la perspectiva de género en ‘La Estación de las Letras’, la octava edición de la feria del libro de La Rinconada. “Un viaje a través de los libros para aprender y mejorar la visión del mundo”, según la definió la conductora del acto, en este caso desde el feminismo.

Márquez no ha sufrido ni ha sido testigo de violencia de género en su entorno. A pesar de ello, “motivado por la indignación que me produce el más mínimo conato de maltrato, he intentado aportar algo que penetrara en alguna conciencia que pudiera ser sanada”, explicó el autor con respecto a la escritura de esta novela.

Obra dirigida especialmente al público masculino

Tampoco tiene formación específica en el tema. Y aunque no es capaz de identificar en qué momento lo empezó a escribir – como sí le ocurre con toda su producción – aseguró que la novela “salió del corazón”. Un libro “explícito” que relata ambages el maltrato y el abuso por parte del hombre hacia la mujer por el mero hecho de serlo.

Aseguró Márquez que le “dolió escribirlo”. Sin embargo, no ha restado ni un ápice de claridad en su texto, con la pretensión de “llegar a un público más masculino que femenino, para compartir con esa parte de la humanidad una visión con tanto sufrimiento”.

Se definió como “escritor muy de impulso” y que solo necesita “un final y a partir de ahí escribo la historia”. Por eso, en ‘Las huellas dejadas’ sabía que padre e hija no se iban a ver, y la carta era la única forma de salvar la distancia entre ambos en el relato. De ahí la elección del género epistolar para esta novela.

Del tema principal se desgajan numerosos hilos que sustentan la historia. Desde el homenaje “a las mujeres de cierta edad que tuvieron que aguantar el maltrato porque no tenían otra salida ni otros recursos” a la actitud egoísta del maltratador, “que quiere morir en paz con la hija y busca un lavado de conciencia que ella no le concede”.

Una mirada masculina para retratar a la mujer maltratada
La presentación, incluida en ‘La Estación de las Letras’ tuvo lugar en el centro cívico Los Silos de La Rinconada

Una novela sobre el perdón, la culpa y el miedo

Desde ahí, todo el relato gira en torno al perdón, la culpa y el miedo. Sobre los últimos, el escritor aseguró que “son prácticamente inevitables, cosa distinta es cómo los utilicemos, como impulso o parálisis”. Deseó, igualmente, “que fuese posible erradicar el concepto de culpa” que tienen las mujeres que sufren maltrato.

Esta nueva sesión de la feria ha trascendido al propio libro presentado y, en todo momento con él como hilo, ha servido para reflexionar sobre el maltrato y la violencia de género, los logros alcanzados y lo que falta por avanzar. A pesar de enfocarse desde una novela de ficción y con personajes recreados, toca un tema de plena actualidad, por lo que la presentación ha servido también como catarsis – como la que experimenta la protagonista con su carta – para la expresión de los presentes.

Tras el análisis del libro por parte de su autor, los asistentes al acto han podido manifestarse sobre el tema, así como intercambiar sus opiniones. “El fin de un libro es la lectura que hace cada lector”, apuntó Márquez. Por ello aseguró sentirse “emocionado por la interpretación” que se dio a su obra por los lectores, ya que la complementan, la completan y repercuten en amplificar el mensaje. Ese tan necesario para “visibilizar la lacra del maltrato” y para cuya erradicación este acto ha sido un altavoz, enriquecido con la perspectiva cultural y literaria, que aprovecha “la ficción para mejorar nuestro entorno”.