El malogrado futbolista José Antonio Reyes, que este 1 de junio cumple tres años de su muerte en un accidente de tráfico, se mantiene muy vivo en la memoria de los sevillistas y así este miércoles el presidente del club, José Castro, acudió al cementerio municipal de Utrera, localidad natal de ambos, para participar en una ofrenda floral ante la tumba del jugador.
Castro acompañó al padre del futbolista, Francisco Reyes, y depositó unas flores en una ceremonia en la que también participó el Padre Indalecio, capellán del Sevilla FC, quien ofició una oración en su recuerdo.
El club hispalense recuerda también que esta próxima pretemporada se vivirá un nuevo recuerdo junto al Arsenal inglés, equipo al que Reyes se fue en su primera salida del Sevilla, con motivo de la disputa en Londres entre ambos de la ‘Emirates Cup’, fijada para el 30 de julio.
Reyes, próximo a cumplir 36 años, lo que hubiera hecho el 1 de septiembre de 2019, no había entrado en la convocatoria del Extremadura, al que había llegado unos meses antes, para el partido que tenían al día siguiente en el Ramón de Carranza, de la penúltima jornada de liga en Segunda.
Esa mañana, tras confirmarse que no jugaría el domingo en Cádiz, partió desde Almendralejo con destino a Utrera en compañía de dos primos con los que estaba en la localidad pacense y en el trayecto por carretera llegó el accidente, en el que el futbolista y un primo murieron y el otro resultó herido grave.
El internacional español fue uno de los jugadores mas precoces que ha dado la muy prolífica cantera del Sevilla y entre sus logros está el de ser el sevillista más joven en debutar con el equipo en Primera, con 16 años.
Arsenal, Real Madrid, Atlético de Madrid y Benfica portugués fueron sus siguientes pasos hasta la vuelta al Sevilla en la temporada 2011-12 para cubrir la segunda etapa en su club de siempre, tras la que también pasó por el Espanyol, Córdoba, Xinjiang Tianshan chino y Extremadura.