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Unai Emery, en la sala de prensa de San Mamés, la pasada semana. / Efe
Unai Emery ha realizado un paréntesis en su concentración junto al plantel en Cartaya (Huelva) para realizar un análisis público del partido que el Sevilla y el Athletic jugarán este jueves en el Sánchez-Pizjuán para dilucidar cuál de los dos pasa a las semifinales de la Europa League. «Tenemos la oportunidad de vivir otro momento bonito. Tenemos ventaja pero la eliminatoria sigue al 50 por ciento. Nosotros estamos preparados para cualquier circunstancia adversa, incluso jugar 120 minutos, necesitaremos de todo y de todos para pasar porque va a ser un partido tan disputado como la ida, el Athletic nos va a exigir muchísimo. Tenemos que jugar al 100 por 100 para disfrutar de un día muy bonito. Hemos ido a Cartaya para estar concentrados al máximo. Queda mucha eliminatoria».
Habrá dos jugadores importantes que no estarán, como son Banega y Tremoulinas. Para Unai no hay dramas al respecto: «Tenemos recursos y mecanismos importantes para competir con el mejor rendimiento y desactivar las opciones de ataque del Athletic, que las tiene y muy importantes. El Athletic también viene sin un jugador importante, pero son cosas naturales en estas fases de las competiciones. Ellos querrán alejarnos de su portería y nosotros querremos acercarnos, será una constante lucha y esa será la principal disputa en cualquier zona del césped. El Athletic es muy ofensivo y tiene que marcar, tendremos que resetear en algunos mecanismos defensivos para ser mejores y en las jugadas a balón parado debemos estar atentos. Va a ser una lucha preciosa».
Como no puede de otra forma, el gol de Antonio Puerta hace diez años en otro jueves de Feria está muy presente en la mente de todos los sevillistas y Emery pretende vivirlo de manera actualizada: «La historia te deja momentos memorables como el de hace 10 años con el gol de Puerta, también en la Feria. Nosotros estamos aquí para vivir otro momento histórico, el de mañana es un día especial y queremos hacer felices a todos los sevillistas como hace diez años. El sentimiento sevillista nos lleva con mucha fuerza para intentar superar a un rival que busca lo mismo y que también ha vivido momentos buenos en esta competición.