Pedir y pagar desde la mesa: hay un millón de bares en Europa y Qamarero aspira a digitalizarlos

"En año y medio de trayectoria hemos crecido de cero a mil clientes. En lo que va de 2024 ya se han gestionado en la hostelería 100 millones de pedidos con el software de Qamarero, y estimamos que en 2025 se llegarán a los 1.000 millones de pedidos a través de nuestra aplicación". Lo expone y lo argumenta Antonio Bustamante Gaitán, fundador y CEO de la startup sevillana Qamarero, creada en 2022. Enfocada en la modernización y digitalización de la operativa en la amplia gama de 27 tipos de negocios de hostelería, sobre todo los pequeños, y tan variados como bares, kebabs, churrerías, chiringuitos, pizzerías, pubs, heladerías, hamburgueserías, cafeterías, etc. “En Europa hay más de un millón de establecimientos de ese cariz y la mayoría aún no se gestionan con herramientas digitales. Nuestro objetivo es ser uno de las empresas tecnológicas líderes en ayudarles a esa evolución, y que alcancemos lo antes posible la cifra de 10.000 clientes”.

Su potencial de presente y futuro se ve además multiplicado por la necesidad que tienen en España todo tipo de empresas para adaptarse a la obligación, a partir del 1 de julio de 2025, de funcionar con Verifactu. Un sistema avanzado de facturación electrónica, para el que es imprescindible disponer de un software de facturación que esté certificado por la Agencia Tributaria, y cuya finalidad es garantizar todas las facturas sean emitidas y recepcionadas de modo digitalizado. Es un paso importante para avanzar en la transparencia y verificación sobre la autenticidad de lo que se factura en cualquier empresa, también las de hostelería.

La entrada en vigor del control por Hacienda

“Esta normativa procede de una directiva de la Unión Europea que ya se aplica en países como Austria, Portugal, Italia. Con Verifactu, en sectores como el de la hostelería, todas las empresas tendrán que estar conectadas con Hacienda en tiempo real, y cada transacción ha de generar un registro digital en su facturación. Nuestro software ya está homologado, y estamos ayudando a muchos clientes, que son empresas muy pequeñas, para que hagan esa transición entendiendo que pueden facturar más sin necesidad de trabajar más. Que pueden sacarle más partido a su actividad”.

Ya hay 50.000 personas que han hecho pedidos a través de nuestra herramienta. Otra de las ventajas es que pueden utilizar nuestro software desde cualquier dispositivo que ya tuvieran

Una de las referencias que muestran es “los comensales gastan un 15% más de promedio cuando piden directamente manejando la aplicación desde las mesas”. Ya hay 50.000 personas que han hecho pedidos a través de nuestra herramienta. Otra de las ventajas es que pueden utilizar nuestro software desde cualquier dispositivo que ya tuvieran. Cualquier móvil puede servir para comandera de pedidos a la cocina. O cualquier tablet puede servir como terminal para pagos. Pueden amortizar los equipos sin comprar otros nuevos”.

Todo en uno por 100 euros al mes

Detalla Antonio Bustamante que “ahora en Qamarero tenemos un ritmo mensual de incorporación de nuevos clientes de entre 150 a 200. La mayoría son de Cataluña o de Comunidad Valenciana. “Les ofrecemos nuestro software, todo en uno, por 100 euros al mes. Queremos que tengan integradas y a su disposición todas las opciones: la página web para posicionarse, el pago por el terminal tpv, la carta digitalizada, la pda para el comandero, la aplicación para que los clientes pidan y paguen directamente, la dedicada al 'delivery' para los envíos y recogidas, las herramientas para analizar el funcionamiento del negocio, el sistema para tramitar la fiscalidad. Nuestro objetivo es convertirnos en su partner tecnológico de confianza durante muchos años”.

El 95% de los clientes los hemos conseguido interactuando en remoto, haciéndoles vía internet una demostración personalizada gratuita, y también hacemos en remoto la implementación del sistema

Asegura que “el 95% de los clientes los hemos conseguido interactuando en remoto, haciéndoles vía internet una demostración personalizada gratuita, y también hacemos en remoto la implementación del sistema. Y la mayoría valora muy positivamente, cuando ya lo han contratado, que es muy sencillo de manejar, el más fácil de los que conocen para explicárselo a las personas de nueva contratación que incorporan. Con el mismo criterio de sencillez, hemos incluido que sea a través de Whatsapp el servicio de atención al cliente, para atender sus incidencias o sus dudas está activo todos los días de la semana durante 16 horas al día”.

Racionalizar las idas y venidas de un camarero

A su juicio, “este segmento de empresas es un mercado donde queda mucho por hacer para modernizarlo tecnológicamente y que entiendan cómo pueden ser más eficientes, y centrarse mejor en cómo obtener rentabilidad. El 90% de los bares en España son empresas con menos de 9 trabajadores. Cuando le demuestras, por ejemplo, que si un camarero que atiende mesas puede hacer mejor su labor dando 100 paseos que 200, y cómo se agiliza el proceso si maneja una comandera digital en lugar de apuntar con bolígrafo, podemos después ir avanzando en que asimilen otros procesos de innovación, relacionados con horarios de trabajo y con ganar más trabajando menos”.

En Qamarero están muy mentalizados en ser útiles a este tipo de pequeñas empresas para ayudarlas en su transformación digital. “Por ejemplo, en facilitarles que su carta esté digitalizada, y en varios idiomas. O en orientarles sobre cómo usar la inteligencia artificial para elaborar sus inventarios, y ahorrarse una hora de trabajo. O enseñarles a analizar con qué productos obtienen mayor margen de rentabilidad. O cómo les conviene poner en la carta referencias amenas sobre la historia de su establecimiento, y sobre la cultura gastronómica que sirve de base a sus especialidades. También seguimos muy atentos para aprender de la experiencia de usuario y crear nuevas funcionalidades. Como hablarle a la comandera en lugar de marcar los productos en la pantalla, y queda registrada a través de inteligencia artificial. Es una opción mucho más rápida y eficaz para las personas que no ven bien, o que quieren hacerlo más rápido”.

No hemos buscado en otros países, pero ya tenemos algunos clientes en París, en Lisboa, en Italia, en Guatemala, en Uruguay, en Puerto Rico y en Indonesia

Su prioridad actualmente es crecer intensamente en el mercado español. “No hemos buscado en otros países, pero ya tenemos algunos clientes en París, en Lisboa, en Italia, en Guatemala, en Uruguay, en Puerto Rico, en Indonesia, porque nos han conocido a través de internet, y por supuesto les atendemos y les damos servicio. Por ejemplo, una cadena británica de hoteles, AG Hotels, tiene 20 establecimientos. Les ayudamos para el servicio de habitaciones y ahora tienen un código QR traducido a todos los idiomas del mundo, Cualquier huésped puede directamente pedir y pagar, y se lo cargan a su habitación”.

En Qamarero tienen la previsión de concluir el ejercicio 2024 con casi un millón de euros de facturación. “La plantilla ha crecido hasta ser ya 30 personas. Estimo que dentro de un año seremos el doble o más. Un tercio de la plantilla son ingenieros o programadores informáticos. Estamos reclutando personas con formación en inteligencia artificial, en análisis de datos, para finanzas, para métricas,...”.

Entre el baloncesto y la formación empresarial global

Antonio Bustamante, nacido en Sevilla hace 40 años, fue jugador profesional de baloncesto, formado en la cantera del Caja San Fernando, y en el puesto de base también compitió en otros equipos españoles. Y en el Liverpool, al que buscó para ampliar su carrera deportiva y con el objetivo de perfeccionar su nivel de inglés. Porque desde que tenía 20 años aunó su pasión por el deporte de la canasta con su interés por el ámbito empresariala.

“En 2005, con mi primo Pablo Castilla Bustamante y otros socios, creamos la empresa que en Sevilla montó Puerto de Cuba, un negocio de hostelería que salió muy bien. Un éxito como terraza para tomar copas y que impulsó su continuidad como grupo empresarial. Y una experiencia que además es muchos años después el germen de Qamarero, porque siempre me ha interesado pensar cómo mejorar la gestión de un sector tan tradicional como la hostelería incorporándole innovación tecnológica”.

En 2005, con mi primo Pablo Castilla Bustamante y otros socios, creamos la empresa que en Sevilla montó Puerto de Cuba, un negocio de hostelería que salió muy bien

Recuerda cómo por entonces reflexionaba sobre la paradoja de que cuando su terraza estaba a rebosar perdían muchas oportunidades de ingresar más, teniendo demanda de más consumiciones por parte de la clientela, porque, por muchos camareros que pusieran, era muy lento el procedimiento de intentar pedir y de intentar servir.

A la vez que se dedicaba al baloncesto decidió adquirir formación empresarial en ámbitos internacionales de referencia en la economía global, y realizó un máster en San Francisco (Estados Unidos) en la Escuela de Negocios Hult. “Además de un año en California, incluía dos meses en Shanghai y dos meses en Londres, y en las tres ciudades con prácticas en empresas de sectores diferentes. Fue una experiencia muy buena. Cuando regresé a Sevilla, monté una empresa de gestión de viviendas turísticas, que ahora lleva mi hermana Elena. Y de la necesidad de resolver cómo formalizar con anticipación y en remoto la recepción y salida de los clientes en esos alojamientos, nació la idea que dio lugar a crear la empresa tecnológica CheKin, que fue muy bien durante los primeros años, y de la que salí tras la pandemia covid para centrarme en fundar y desarrollar Qamarero”.