De la etiqueta 1.0 a la ‘inteligente’

La ‘startup’ Naturecode «democratiza» la distribución de pequeños productores agroalimentarios

27 nov 2016 / 20:17 h - Actualizado: 27 nov 2016 / 20:18 h.
"Economía","Agroalimentación","Emprendedores","El campo y su agroindustria"
  • Fernando Vázquez y Alberto Fernández, director de Marketing y director técnico de Naturcode. / El Correo
    Fernando Vázquez y Alberto Fernández, director de Marketing y director técnico de Naturcode. / El Correo

Cuando coge, por ejemplo, una botella de aceite y se fija en su etiqueta podrá conocer su origen, dónde se embotella y su información nutricional básica. Es lo que se conoce como etiqueta estática o 1.0. Pero si es una persona concienciada con los procesos de producción o le gusta conocer el recorrido del producto desde la materia prima hasta que lo consume, es más difícil acceder a dicha información.

Ahora es posible de la mano de Naturecode, una startup de origen sevillano y onubense, «que facilita la comunicación directa entre el productor y el consumidor, sin necesidad de intermediarios gracias a la etiqueta inteligente», explica el responsable de Marketing de la plataforma, Fernando Vázquez. Además, esta plataforma permite que pequeños y medianos productores «tengan la misma presencia online que una gran compañía».

Naturecode está pensado principalmente para los productores que no tienen acceso a las grandes distribuidoras, aunque «la plataforma no actúa como intermediario», matiza Vázquez. El productor introduce en su área sus datos fiscales, su logotipo, fotos, la historia de la empresa, además puede incluir la descripción organoléptica del producto, su documentación, los cuadernos de campo, la huella de carbono o el análisis antiresiduos, además de los valores nutricionales. Una información que no se publicará hasta que no esté validada y que se podrá modificar a tiempo real según haya o no stock, cambien las características del producto o si ha conseguido algún reconocimiento.

El consumidor podrá acceder a esta información a través del código QR que aparecerá en la etiqueta estática del producto y adquirirlo a través de la página web del propio productor –a la que se redirigirá desde Naturecode–. La compra se puede efectuar desde cualquier punto del mundo, dado que son muchos los turistas que prueban productos locales que luego no pueden consumir en su país.

La plataforma «no distingue entre volumen de producción, distribución geográfica ni marca». Está abierta a todos los productores dado que persigue una distribución «más justa». De hecho, la calidad la determinan los consumidores cuando evalúan el producto.

Por el momento, son pequeños productores los que venden sus productos a través de la plataforma, aunque el proyecto ya se ha presentado al sector de la fresa y a productores sevillanos de vino. Y a partir de febrero, podrán vender sus productos a través de esta plataforma productores a granel, «un sector que en los últimos 30 años no ha subido el precio de sus productos», señala Vázquez.

Naturecode surgió de la inquietud de Joaquín Fernández, un productor de vino ecológico de Ronda, que acudió a la empresa de marketing digital de Vázquez preocupado por la poca salida comercial de sus productos, más allá de las ventas que efectuaba durante las visitas a la bodega. Fue así como surgió esta plataforma que democratiza el market place.

La plataforma cuenta con el apoyo de la Unión de Consumidores de Andalucía (UCA/UCE). Los creadores de esta herramienta la diseñaron después de realizar una encuesta a los 30.000 asociados de la UCA/UCE sobre sus prioridades a la hora de comprar un producto. La Consejería de Agricultura también apoya el proyecto.