El pleno del CGPJ elegirá el martes a su presidente entre los siete magistrados del Supremo propuestos

El pleno del Consejo General del Poder Judicial se volverá a reunir el martes para elegir a su próximo presidente entre los siete magistrados que han sido propuestos este jueves por los propios vocales. Se trata de los jueces del Tribunal Supremo, de distintas sensibilidades, Esperanza Córdoba, Antonio del Moral, Ana Ferrer, Ángeles Huet, Carmen Lamela, Pablo Lucas y Pilar Teso. Su elección supondrá el fin de la bicefalia que desde la dimisión de Carlos Lesmes ha vivido el CGPJ y el alto tribunal.

El nuevo CGPJ ha echado a andar este jueves con más de cinco años y medio de retraso, gracias al acuerdo alcanzado entre el PSOE y el PP, después de que sus 20 vocales juraran o prometieran su cargo ante el rey Felipe VI, en presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, que destacó la recuperación de la "normalidad" en el órgano de gobierno de los jueces.

Una "anomalía institucional" con la que el pleno constitutivo acaba, destacó  Bolaños, que calificó este jueves de "día grande para la justicia española", por el que se ha recibido la felicitación de la Comisión Europea, al suponer que "los poderes del Estado funcionan con normalidad y trabajan para el país".

Tras el acto en Zarzuela y el saludo del rey a todos los vocales, estos se reunieron en edificio de Marqués de la Ensenada bajo la presidencia del vocal de más edad, Bernardo Fernández. En la sesión los vocales propusieron a las magistradas de la Sala Tercera Esperanza Córdoba (antes fue jefa del servicio de Inspección, lo que hace conocer muy bien la carrera), Ángeles Huet y Pilar Teso, quien ya fue propuesta hace 10 años para presidir el anterior Consejo, aunque solo obtuvo cuatro votos frente a los 16 que recibió Lesmes.

De la Sala de lo Contencioso también se ha propuesto a Pablo Lucas, aunque el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, siempre ha mostrado su preferencia por una mujer. Tanto Lucas como Córdoba son considerados moderados y Huet y Teso, de sensibilidad progresista. Huet estuvo en la Sala que en un primer momento rechazó revisar los indultos del 'procés', lo que se acabó haciendo cuando ella pasó a la sala de admisión.

Los magistrados propuestos para presidir el CGPJ y el Supremo de la Sala Segunda son Antonio del Moral, Carmen Lamela y Ana Ferrer. Los dos primeros son de sensibilidad conservadora y Ferrer, progresista, de hecho ha sido la única que se ha mostrado partidaria de aplicar la amnistía al delito de malversación por el que se condenó a los líderes del 'procés' en la sentencia de octubre de 2019. Tanto Del Moral como Ferrer formaron parte del tribunal que juzgó el 1-O, mientras que Lamela fue la instructora del procedimiento seguido contra el mayor de los Mossos Josep Lluís Trapero, que acabó en su absolución, y la seguida contra el expresidente del Barça Sandro Rosell, por la que estuvo preso y también acabó absuelto.

La elección se producirá entre los siete candidatos propuestas en el pleno a través de varias rondas en las que se irá descartando al que cada vez obtenga menos votos hasta que solo queden dos. Se supone que esta vez serán los vocales los que elijan a su presidente sin contar con los partidos que les han propuesto.

La primera vez que se rompieron las negociaciones el candidato pactado entre los dos grande partidos era el presidente de la Sala Segunda del Supremo, Manuel Marchena, quien renunció a cualquier posibilidad de presidir el alto tribunal cuando se filtró un 'whatsapp' del entonces portavoz del PP en el Senado, Ignacio Cosidó, en el que defendía que con su elección controlarían "por detrás" la sala del alto tribunal que el magistrado ya presidía entonces.

El presidente del CGPJ y del Supremo tiene que ser o un magistrado del alto tribunal o un jurista de reconocida competencia con más de 25 años de antigüedad en el ejercicio de la profesión. Será elegido en el pleno que se celebrará el próximo martes. Entre sus primeras obligaciones estará la de nombrar al más del centenar de vacantes que existen en la cúpula judicial. Además, tendrá seis meses para plantear una propuesta para reformar el sistema de elección del Consejo, que produjo el bloqueo de la renovación del órgano.