El Gobierno recupera a Mercedes González al frente de la Guardia Civil tras la "renuncia" de Leonardo Marcos

El Consejo de Ministros ha nombrado este martes a Mercedes González como nueva directora general de la Guardia Civil. Un cargo que ya ocupó durante apenas tres meses, entre marzo y junio del pasado año. Entonces sustituyó a María Gámez y abandonó el cargo poco después para presentarse en la lista del PSOE a las elecciones generales del pasado año. Este martes se ha hecho efectiva su renuncia del acta en el Congreso. González aprovechó la reunión este lunes de la interparlamentaria del PSOE, presidida por Pedro Sánchez, para despedirse de sus compañeros de grupo, según fuentes presenciales. Mercedes González fue delegada del Gobierno en Madrid entre 2021 y 2023.

González sustituye al frente de la Guardia Civil a Leonardo Marcos, que según fuentes de Interior ha presentado su renuncia al cargo a petición propia, “por motivos personales”. El pasado 12 de septiembre trasladó su intención de reincorporarse al Cuerpo Superior de Administradores Civiles del Estado. El Gobierno recupera así como directora general de la Guardia Civil a un perfil político. González no solo salta desde el grupo socialista, sino que sigue siendo secretaria general del PSOE en la capital.

Óscar Puente nombra a Luis Pedro Marco de la Peña nuevo presidente de Adif

Desde Interior relativizan el perfil político de Mercedes González al destacar la "absoluta neutralidad" del Cuerpo y "su trabajo permanente en la defensa de los derechos y libertades de todos los ciudadanos, en el marco del ordenamiento jurídico y, como policía judicial, en las investigaciones que les son encomendadas". Por otro lado, saubrayan de González que cuenta "con una experiencia y una trayectoria idóneas para dirigir la Guardia Civil, por su conocimiento de la institución y por su contrastada capacidad de gestión".

El Consejo de Ministros también nombrará este martes al nuevo presidente de Adif, tras la destitución de Ángel Contreras por el caos ferroviario. Solo diez meses después de su nombramiento, el ministro Óscar Puente ha decidido cesarlo para darle un nuevo impulso a la empresa pública de infraestructuras ferroviarias y en el marco de una remodelación más amplia de su organigrama, según fuentes del ministerio. Su sustituto será Luis Pedro Marco de la Peña (Santander, 1969), hasta ahora viceconsejero de Infraestructuras y Transportes del País Vasco.

Con la salida de Mercedes González del Congreso, el número de renuncias en el grupo socialista se eleva a 27 desde el inicio de la legislatura. La última en abandonar el escaño fue Adriana Lastra, el pasado mes de julio. La que fuera vicesecretaria general del PSOE dejó su acta para ser nombrada delegada del Gobierno en Asturias. Como ella, un buen número de los cabeza de la lista en las elecciones generales ya no forman parte del Congreso poco más de un año después de tomar posesión de su acta.

Renuncias en el grupo socialista

La primera en renunciar fue Meritxell Batet, al abandonar la primera línea de la política solo una semana después de recoger su acta. Antes de Lastra lo había hecho Hana Jalloul, tras obtener escaño de eurodiputada en los comicios europeos del pasado 9 junio.

El agitado grupo socialista, más allá de la marcha de José Luis Ábalos al Mixto, ha variado su composición a pasos acelerados. El primer gran recambio se produjo después de la formación de Gobierno. Ocho de los once ministros del PSOE que habían ido en las listas electorales dieron un paso al lado para dejar correr las listas y para garantizar las votaciones por sus agendas.

Solo conservaron su acta, además del propio Pedro Sánchez, la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el ministro de la Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, y el titular de Transportes, Óscar Puente. Antes de ello, Antonio Hernando y Francisco Salazar renunciaron coincidiendo con sus confirmaciones en el gabinete del presidente. Los siguió Óscar López, al confirmarse como jefe de gabinete de Pedro Sánchez, cargo que ha dejado recientemente para ser nombrado ministro de Transición Digital y Función Pública.

A partir de entonces se sucedieron las renuncias por el nombramiento de diputados socialistas en otros cargos de responsabilidad. Desde secretarías de Estado a diferentes organismos tanto nacionales como internacionales. Entre ellos Paradores (Raquel Sánchez), la presidencia del Consejo de Estado (Carmen Calvo) o las embajadas españolas ante la ONU (Héctor Gómez) y la Unesco (Miquel Iceta). Otros lo hicieron para asumir la portavocía en parlamentos autonómicos, como fue el caso de José Ramón Gómez Besteiro tras las elecciones gallegas.