Torres niega haber cobrado comisiones de la 'trama Koldo': "Si alguien demuestra lo contrario, yo me marcho"

El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, ha asegurado este jueves, durante su comparecencia ante la comisión de investigación del Senado que trata de dirimir responsabilidades políticas por el caso Koldo, que ni tiene ni ha tenido "ninguna relación" con el supuesto conseguidor de la trama, el empresario Víctor de Aldama. Además, Torres ha respondido con un "rotundo no" a la acusación de De Aldama de que Koldo le pidió 50.000 euros para él: "No encontrará jamás mensaje o llamada de teléfono en la que Ángel Víctor Torres haya pedido o solicitado comisión alguna; yo abomino de la corrupción". El ministro ha subrayado que está dispuesto a dejar el cargo si se demuestra que ha pedido comisiones: "Si se demuestra, yo me marcho". "Estoy reclamando y exigiendo que ante acusaciones tan graves se saquen pruebas", ha subrayado.

El que fuera presidente del Gobierno de Canarias en la anterior legislatura autonómica sí ha reconocido que tuvo "interlocución" con Koldo García mientras este fue asesor en el Ministerio de Transporte. No obstante, ha aseverado que “jamás” ordenó que se contratara con las empresas de la trama durante su etapa al frente del Ejecutivo canario. "En el comité de gestión", el órgano que la Comunidad Autónoma puso en marcha para gestionar la crisis sanitaria, "no se hablaba de empresas", ha afirmado Torres: "Jamás se habló de que hay que contratar a esta o aquella empresa".

El caso Koldo debe su nombre a Koldo García, asesor de José Luis Ábalos durante su etapa como ministro de Transporte. La ramificación canaria del caso, que es la que ha llevado al ministro a comparecer ante la comisión parlamentaria de la Cámara Alta, está relacionada con una serie de contratos públicos adjudicados por el Ejecutivo isleño durante 2020, el año I de la pandemia de la covid, a entidades vinculadas a la presunta trama corrupta que lideraban, en el papel de conseguidores, el empresario Víctor de Aldama y el propio Koldo García.

La supuesta trama, que se habría servido de los contactos del entonces asesor de Ábalos en las instituciones gobernadas por el PSOE para conseguir adjudicaciones millonarias, se hizo en el archipiélago con una serie de contratos por un montante de 12,3 millones de euros a través de la sociedad limitada Soluciones de Gestión, que debía adquirir y traer a las islas varios lotes de mascarillas sanitarias. Soluciones de Gestión no tenía como objeto social la compra y/o suministro de material médico o sanitario, de modo que no se acreditó la necesaria solvencia profesional o técnica que justificase su contratación. Sobre esto, Torres ha explicado que muchas empresas que sí tenían el objeto social adecuado no tenían capacidad ni solvencia para traer el material médico que Canarias precisaba, con lo que no quedó más remedio que echar mano de las posibilidades que había. El caso es que ni siquiera el hecho de que parte de las mascarillas no se ajustase a los términos de la adjudicación (los hospitales canarios detectaron que los tapabocas no tenían la calidad que debían) evitó que el Servicio Canario de la Salud (SCS) volviese a echar mano de Soluciones de Gestión para un posterior encargo de otra partida de mascarillas.

Ese primer negocio de la presunta trama corrupta en el archipiélago no fue, sin embargo, el único. A los 12,3 millones de euros obtenidos a través de Soluciones de Gestión se suman otros 5,4 millones del contrato suscrito con la firma Megalab para que esta se encargara de la realización de test gratuitos para la detección de la covid a los residentes canarios que fuesen a regresar a las islas desde la Península, en avión o en barco, durante las Navidades de 2020, primero, y la primavera de 2021, después. Es justo el negocio de Megalab el que salpica al ministro Torres de forma directa, si bien este ha insistido este jueves en el Senado en que “en los informes de la UCO no hay ningún reproche a la actuación del Gobierno de Canarias”. Además, el ministro ha cuestionado el relato temporal de la UCO sobre la contratación de Megalab, ya que la operación en la que se centra la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, relacionada con un protocolo de pruebas PCR, no prosperó, es decir, no fue la que llevó a la trama a hacerse con esos 5,4 millones.

La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, en el último informe sobre el caso Koldo entregado al juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno, revela una conversación vía Whatsapp entre Torres e Ignacio Díaz Tapia, otro de los cabecillas de la supuesta red delictiva que actuaba como representante de Megalab, en la que el exjefe del Gobierno canario le explica al empresario que ya había hablado con "Illa" –Salvador Illa, entonces ministro de Sanidad y hoy presidente de la Generalitat catalana– y que parecía existir "buena recepción" a su propuesta para contratar con Megalab un "protocolo de pruebas PCR" que permitía los viajes en avión sin peligro de contagio. Antes de ese intercambio de mensajes, que tuvo lugar el 25 de agosto de 2020, y a pesar de que Torres dijo en el Congreso que "creía no conocer" a Díaz Tapia (este jueves se reafirmó en que en aquel momento creía no conocerlo), el entonces presidente canario ya se había reunido con el empresario en el despacho que el Parlamento de Canarias dispone para el jefe del Ejecutivo regional. Fue allí, el 19 de agosto de 2020, cuando el cabecilla de la trama le presentó al hoy ministro la propuesta de Megalab.

Con todo, no fue el que tuvo con Díaz Tapia el único contacto directo entre el ahora titular de la cartera de Política Territorial y los cabecillas de la supuesta red delictiva. De hecho fueron De Aldama y Koldo García quienes promovieron el negocio de Megalab en Canarias.

El 14 de agosto de 2020, con la covid en su apogeo, De Aldama le propone a Koldo ofrecer el negocio de los test PCR a Canarias. En esa misma conversación, el que fuera asesor de Ábalos comenta que Ángel Víctor Torres ya le había dicho que "quería hablar de este mismo tema". "Es muy importante y nos debe una grandísima", le respondía Aldama a Koldo García, en alusión al expresidente canario, en aquella misma conversación. Tres días después, el 17 de agosto, el entonces asesor del ministro Ábalos y presunto conseguidor de la trama –un papel que la UCO atribuye por igual a Koldo y a De Aldama– le envía un audio de Whatsapp a Torres para venderle a Megalab "como un laboratorio completamente introducido en Canarias" que "había ideado un protocolo de pruebas PCR para facilitar vuelos seguros del virus". Un mensaje de voz en el que Koldo le cuenta al también secretario general del PSOE canario que en el Ministerio de Transporte ya habían hablado con representantes de Megalab, algo de lo que "tiene conocimiento el ministro" –precisó en alusión a Ábalos–, y en el que le pide que haga lo propio y también los reciba para escuchar su propuesta. Vendría después el encuentro entre el hoy ministro y Díaz Tapia.

Aquel audio del 17 de agosto no sería el último mensaje que Koldo le enviaría al expresidente isleño. Los agentes de la UCO localizaron dos whatsapps más de Koldo a Torres que revelan su interés en que los negocios de la trama en las islas prosperasen. En el primero, enviado el 21 de agosto, el exasesor de Ábalos le pide a Torres que ejerza presión para desatascar la cuestión de las pruebas PCR. "Apreta con los pcr que lo consigues seguro queda nada para que los pongan" (sic), le escribió entonces. Y en el segundo, cuatro días después –el 25–, el supuesto conseguidor de la trama lo insta a que le dé una llamada telefónica: "Llámame por favor tema pcr". Al respecto, el ministro precisó que el Gobierno de Canarias trabajaba para convencer a los técnicos del Ministerio de Sanidad de la conveniencia de poner en práctica un plan de vuelos seguros que al final no salió adelante. Ese "aprieta" de Koldo, ha ahondado Torres, se circunscribe a esas gestiones, que también involucraban al Departamento de Transporte, y que al final no prosperaron, con lo que tampoco lo hizo ese negocio en concreto de la trama, que no obstante se haría con esa posterior adjudicación por esos 5,4 millones.

Hay que recordar que Koldo García ha asegurado que Ángel Víctor Torres no recibió ni un solo euro de Víctor de Aldama, quien por el contrario ha afirmado que el exasesor de José Luis Ábalos le pidió 50.000 euros para el ahora ministro de Política Territorial. Este mismo miércoles, Torres ya se había mostrado dispuesto a dejar su cargo si se demuestra que ha pedido comisiones. "Si alguien de ustedes [en alusión al PP] es capaz de demostrar no ya que me haya llevado, sino que haya pedido no 50.000, ni 20.000, ni 1.000, sino un solo euro a lo largo de mi vida política, lo dejo", aseguró.