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Esta es la impresionante cascada escondida en un sendero a tan solo media hora de Sevilla

Las últimas lluvias permiten contemplar una estampa que hace años que no se daba, una abundante cascada a 40 kilómetros de la capital hispalense: un auténtico espectáculo sonoro y visual

La cascada del Salto del Lobo está esplendorosa debido a las últimas lluvias del otoño.

La cascada del Salto del Lobo está esplendorosa debido a las últimas lluvias del otoño. / El Correo

Ana Carretero

Ana Carretero

El emblemático río Guadiamar, ese que nutría con sus aguas en el pasado a las lagunas del Parque Nacional de Doñana, y que ahora quieren reconectar de nuevo con las marismas onubenses, es el protagonista de esta sencilla ruta a media hora en coche de Sevilla.

Las abundantes lluvias del otoño, que han permitido que se recuperen las reservas de los embalses de la provincia y han batido récords de precipitaciones respecto a los registros históricos, son las responsables que los amantes de la naturaleza y de los largos paseos por el campo puedan disfrutar este año de una jornada de senderismo en paralelo a un río caudaloso hasta descubrir la estampa más bella del camino: la impresionante cascada conocida como El Salto del Lobo.

La ruta comienza en la carretera N-433, en El Alisar, a unos 5 km de El Garrobo, ya en el término municipal de El Castillo de las Guardas, a 44 kilómetro de la capital. En el arranque de la misma hay aparcamiento. No entraña especial dificultad ni por su longitud ni por su trazado, ya que no alcanza los diez kilómetros y puede completarse en algo más de dos horas. Por eso, es un sendero ideal para realizarlo en familia. Un plan idóneo para estos días de vacaciones, en el que más allá de las comilonas navideñas y las reuniones, siempre es una buena opción oxigenarse en los excepcionales parajes naturales de la provincia sevillana.

Esta senda permite contemplar la diversidad de paisajes por los que discurre el río Guadiamar y el gran patrimonio natural que este atesora. La mejor guía para no perderse es el cauce alto del río, comenzando en el estanque, divisando a su paso la riqueza botánica que propicia la abundancia de agua. Tras la caminata, el premio: la pronunciada garanta y la cascada del Salto del Lobo.

La mejor guía para no perderse es el cauce alto del río, comenzando en el estanque, divisando la a su paso la riqueza botánica que propicia la abundancia de agua

Un salto de unos 40 metros sobre el valle por donde el agua discurre con rapidez y se precipita ruidosa en varios puntos desde la plataforma rocosa a través de la que discurre a esa altura. En este punto, se pueden observar, escondidos entre la maleza, los restos de un antiguo molino harinero.

Una ruta siguiendo el bello cauce del emblemático río Guadiamar.

Una ruta siguiendo el bello cauce del emblemático río Guadiamar. / senderismosevilla.net

Un excepcional bosque de ribera

Este bosque de ribera está compuesto por fresnos, álamos y sauces, principalmente. La fauna piscícola está compuesta, entre otras especies, por el barbo, la carpa, la boga, la anguila, o el albur. Ligados al medio acuático localizamos el galápago leproso, la culebra viperina y gran número de especies de anfibios.

La provincia de Sevilla cuenta con rincones menos conocidos como este, pero que sorprenden al viajero. Uno de ellos es, sin duda, la ribera del río Guadiamar

Gran número de pájaros también campean por la arboleda y los extensos sotos que bordean el cauce: mirlos, verderones, chamarines y garzas reales. A los que dan paso con la llegada de la primavera los abejarucos, golondrinas, ruiseñores y milanos. Entre los mamíferos se localizan especies como la liebre y el jabalí, y son muchos los carnívoros que sobreviven aquí como zorros, tejones, meloncillos, ginetas o nutrias.

Este sendero permite contemplar un gran número de pájaros. que campean por la arboleda y los extensos sotos que bordean el cauce.

Este sendero permite contemplar un gran número de pájaros. que campean por la arboleda y los extensos sotos que bordean el cauce. / senderismosevilla.net

La provincia de Sevilla cuenta con rincones menos conocidos como este, pero que sorprenden al viajero. Uno de ellos es, sin duda, la ribera del río Guadiamar. Para llegar hasta esta cascada tan solo hay que realizar una sencilla ruta, que además, durante los meses de otoño e invierno adopta una belleza especial. Todo un espectáculo natural por su variedad cromática, sus olores y sus sonidos.

Información sobre esta ruta:

  • Localidad: El Castillo de las Guardas
  • Distancia: 8,2 km
  • Duración: 2 h
  • Nivel de dificultad: Fácil
  • Apta para perros:
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