Ruta por algunos de los establecimientos más emblemáticos de Alcalá aprovechando la excepcional ocasión de disfrutar la ciudad que ofrece la Semana Santa. Reconfortan el estómago y a veces también el alma. Son las pausas necesarias entre paso y paso, entre Hermandad y Hermandad, entre sones y saetas. Son personas que dedican su trabajo para satisfacer las necesidades de los demás, ellos llevan la devoción por dentro y fuera, ofreciendo lo mejor sí.
Aunque parezca que estamos en La Campana de Sevilla, el Centro de Alcalá se caracteriza con grandes establecimientos dedicados a la Hostelería que hacen que luzca más si cabe, nuestras tradiciones en la Ciudad. Ahora en Semana Santa, muestran los mejores productos, las mejores tapas, los mejores sabores, el rico pastel cofrade o las mejores tertulias. El bullicio tanto en una buena barra o al lado de ella. Grandes profesionales de la Hostelería que son como esos buenos capataces y costaleros, que dan lo mejor sí para que todos se vayan con el mejor sabor en la boca.
Es la otra Semana Santa Alcalareña, que se ve pero que es desconocida para muchos. Trabajadores como los que más, con dedicación en cuerpo alma, con señas de identidad alcalareña y con profesionalidad. Así son quiénes tienen la dicha de ofrecer lo mejor en cada momento.