¿Qué tipo de retención se aplica a los profesionales autónomos cuando entre en vigor la reforma fiscal? Si tenemos en cuenta la estrategia del Gobierno de incrementar el autoempleo como alternativa a la sangría laboral durante la crisis económica y, de hecho, ha rebajado las cuotas mensuales que han de abonar los jóvenes, era lógico que actuara también en materia de fiscalidad para respaldarlos aún más. Los contribuyentes dedicados a actividades profesionales, agrícolas, ganaderas y forestales, así como algunas labores en módulos, deben aplicar los siguientes porcentajes de retención en sus facturas: Uno, el 19 por ciento en 2015 y el 18 por ciento en 2016, frente al actual 21 por ciento, cuando se trata de profesionales. Dos, desde el 4 de julio de 2014, cuando el rendimiento íntegro del autónomo es inferior a 15.000 euros anuales, el 15 por ciento. Tres, los nuevos autónomos en actividades profesionales, el 9 por ciento el año del inicio de la actividad y los dos siguientes años. Y cuatro, en los trabajos agrícolas, ganaderos o forestales, el 1 o 2 por ciento, y aquí la casuística es grande. Así lo detallan fuentes de las asociaciones de autónomos. A partir de 2015, asimismo, el importe que se deducía por provisiones y gastos de difícil justificación en el régimen de estimación directa para autónomos con actividades empresariales o profesionales que facturen por debajo de 600.000 euros anuales se mantiene en un 5 por ciento, aunque se establece un máximo de 2.000 euros anuales de deducción. Es una manera de combatir el fraude como también el umbral de exclusión vigente también desde julio para quienes aspiren a acoger al régimen de módulos, de 450.000 a 150.000 euros de ingresos y de 300.000 a 150.000 de gastos como norma general, aunque hay una larga lista de excepciones.
