El líder Kim Jong-un revisando armamento. / El Correo
El régimen dictatorial de Kim Jong-un condena a muerte a aquellos funcionarios que ven telenovelas de su vecino del sur, según informa The telegraph basándose en los informes de la agencia de inteligencia de Corea del Sur. El número de decapitaciones podrían haber llegado a 50 en lo que va de año. Dentro de este número habría que incluir a 10 funcionarios del Partido de los Trabajadores. Los cargos con los que se acusó a los 10 trabajadores públicos son corrupción, visualización de telenovelas prohibidas y ser mujeriego, entre otros comportamientos inapropiados. Algunos de los funcionarios ajusticiados formaban parte del círculo cercano del también ejecutado Jang Song-thaek, tío de Kim Jong-un y antiguo número dos del Gobierno de Corea del Norte, al que el régimen acusó de «consumir drogas y malgastar divisas en los casinos».
Estas acciones forman parte de la política del líder comunista Kim Jong-un, que busca deshacerse de cualquier manera de oposición. Pero a pesar de las duras medidas, aún se sigue encontrando resistencia a las prohibiciones, ya que según afirman distintos desertores, las versiones pirateadas de programas de televisión de Corea del Sur y China están ampliamente disponibles.
La era tecnológica le está plantando cara a las restricciones del país, ya que la manera que han encontrado los hackers norcoreanos para seguir en contacto con los contenidos del exterior es a través de dispositivos electrónicos.
