El Fondo Monetario Internacional (FMI) predijo ayer miércoles que la economía española se contraerá "al menos" un 1% en el 2009, tres décimas más que lo que había calculado hace poco más de un mes. A corto plazo, las perspectivas son "sombrías e inciertas", dijo un grupo de sus expertos al concluir una visita a Madrid, en la que analizaron la situación de la economía y se entrevistaron con las autoridades españolas.

A medio plazo las cosas no pintan mucho mejor, a su juicio. El FMI señaló que la recuperación depende de la aplicación de reformas profundas. "Si no se llevan a cabo, España podría verse atrapada en una situación de baja competitividad, bajo crecimiento, desapalancamiento generalizado y alto desempleo, desde la cual sería difícil volver a un nivel bajo de deuda pública", alertó.

El FMI cree que el desapalancamiento -la reducción de la deuda del sector privado- es un fenómeno ya presente, que se refleja en la caída del consumo y la renuencia de las empresas a invertir. Además, aconsejó la liberalización de los sectores de servicios y de transportes, donde existen normas que dificultan la competencia.