Una mujer de 43 años y sus dos hijos, de tres y nueve años, murieron el viernes en el incendio de su vivienda en Barcelona. Un cortocircuito, originado al parecer por una sobrecarga eléctrica, es la causa más probable del siniestro que de madrugada les provocó el fallecimiento por asfixia mientras dormían en su piso del distrito de Ciutat Vella.
En declaraciones a los periodistas, la concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Assumpta Escarp, explicó que un vecino avisó a los Bomberos del incendio y rápidamente acudieron equipos de los parques de Drassanes y Provença, que accedieron al piso sin demasiados problemas porque "la puerta estaba entreabierta".
Aún así, cuando los bomberos llegaron a una habitación situada al fondo del pasillo, donde se encontraban la mujer y sus hijos asfixiados por la inhalación de humo, les intentaron reanimar, aunque sin éxito. Según Escarp, el jefe de Guardia de los Bomberos le explicó que las víctimas fallecieron por asfixia, ya que no tenían quemaduras en sus cuerpos. Los vecinos fueron desalojados, aunque horas después volvieron a sus viviendas sin problema.
