"El ascenso pasa por ganar todos los partidos y no han cambiado sustancialmente ni el objetivo ni la forma. Somos conscientes de que sólo queda ganar sí o sí y hacer esta hazaña o heroicidad. El equipo hizo un muy buen partido. A medida que avanzaba iba cayendo en el nerviosismo de no tener el resultado a favor, jugar con esta presión es muy difícil y, además, venimos de una semana durísima, pero el equipo mostró una gran unidad y estuvo muy bien organizado. Nos faltó más pegada y presencia en el área, pero estoy feliz con la actitud", recalcó Víctor Fernández tras la victoria en Tarragona. Y cuando se le preguntó si el ascenso seguía siendo casi una quimera, respondió: "El ascenso está como la semana pasada, muy complicado". Pero su enfoque ahora es otro. "El equipo no tuvo buenas sensaciones contra el Murcia, pero hoy me ha dejado muy buenas sensaciones. Con buenas sensaciones, los objetivos se ven más cerca. El partido invita a la confianza y a la perseverancia", dijo. El técnico también pidió el apoyo de la afición: "Ahora el bético se dará cuenta de que si muere va a ser de pie, que nadie se va a relajar, y estoy convencido de que el domingo estará apoyándonos. Necesitamos unidad, el partido va a ser brutal".
