Cerrada por obras. Desde este lunes la iglesia parroquial de Santa Cruz, en la calle Mateos Gago, se encuentra cerrada temporalmente por obras debido a los trabajos de conservación y mantenimiento que se van a realizar en su interior, relacionados fundamentalmente con la reparación de la solería. Con tal motivo, la parroquia de Santa Cruz y la hermandad del mismo título, asentada en esta iglesia, han trasladado su actividad pastoral y sus cultos al Oratorio de la Escuela de Cristo, anexo al templo y con entrada por la calle Alonso Chaparro, junto a la casa de hermandad. Estas obras se prolongarán durante mes y medio, por lo que la reapertura de la iglesia parroquial está prevista para la primera semana de octubre.

Desde el pasado mes de junio en el templo de la calle Mateos Gago se vienen desarrollando obras de conservación y mantenimiento que no sólo han afectado a su interior. El proyecto de conservación ha sido redactado por el arquitecto Fernando Parra y la financiación de los trabajos será afrontada a partes iguales por la Archidiócesis y la propia parroquia, al frente de la cual se encuentra desde el año 2011 el sacerdote Eduardo Martín Clemens.

Las obras de conservación y mantenimiento se iniciaron el pasado me de junio. La primera de las actuaciones se circunscribió al exterior del cuerpo de cúpula, con diversas actuaciones de mantenimiento en la zona. Los siguientes trabajos se centraron en las cubiertas de la parroquia, que presentan problemas de estanqueidad.

En una tercera actuación se ha intervenido sobre la fachada principal y laterales del templo, con trabajos que han incluido desde la limpieza, la reposición de piezas, picado y enfoscado hasta la pintura, la sustitución de carpinterías en mal estado o la revisión de canalones.

A partir de este momento se iniciarán los trabajos en las dependencias parroquiales así como en el interior del templo. Las actuaciones de esta última fase del proyecto de obras incluirán la reparación de solería, los zócalos, la tribuna perimetral y los techos, entre otros trabajos.

El hermano mayor de la hermandad de Santa Cruz, Juan Jiménez, asegura que estas obras de conservación «se estaban haciendo ya muy necesarias porque los días de lluvia intensa el agua se filtraba a través de la cúpula y caían gotitas».

El Cristo de las Misericordias, la Virgen de los Dolores y la imagen de Santa María de la Antigua amanecieron ya este lunes en el Oratorio de la Escuela de Cristo, donde recibirán culto hasta primeros de octubre. «Se trata de un templo de tamaño bastante más reducido al de la parroquia. Tendrá un tercio de los bancos. En un principio, no estaba previsto que las obras implicasen el cierre del templo dado que los trabajos de la solería se pensaron acometer por partes. Pero después los arquitectos comprobaron que resultaba casi imposible».

El hermano mayor confía en que las obras concluyan «en plazo». Para el año que viene se esperan las obras de peatonalización de Mateos Gago. «Estamos rodeados de obras», acepta con resignación.

EL TRIDUO A LA VIRGEN, EN EL ORATORIO

Desde este lunes todos los cultos de la hermandad de Santa Cruz se trasladan al Oratorio de la Escuela de Cristo, de donde las imágenes regresarán a su sede en octubre. Durante este breve exilio, la corporación celebrará los cultos anuales de regla en honor de la Virgen de los Dolores. «El triduo se desarrollará los días 13, 14 y 15 y la solemne función el domingo 16. No es la primera vez que celebramos cultos allí. En 1998 ya celebramos un quinario por problemas en la cubierta de la parroquia».