María Santísima de la Paz tendrá, al fin, un nuevo palio. Así lo han decidido los hermanos de la corporación de El Porvenir reunidos en cabildo general extraordinario celebrado en la noche del miércoles 26 de octubre. De los 298 cofrades asistentes, 282 han apoyado el proyecto, 4 se mostraron en contra y 12 se abstuvieron. No es la primera vez que se trata este asunto en la Hermandad de la Paz, pues éste fue objeto de otro cabildo celebrado el lunes 29 de junio de 2015, donde entonces se presentó un proyecto dibujado por Manuel Solano, si bien la votación de hace siete años fue anulada ante la cantidad de dudas que se generaron, tanto desde el punto de vista artístico y estético como económico.
La junta de gobierno que actualmente preside como hermano mayor Vicente Flores Alés ha venido trabajando en esta idea durante los últimos meses. De hecho, en abril del pasado año 2021, fue nombrada una comisión para estudiar este tema con la delicadeza que ello requería con respecto a la estética de su patrimonio, estando compuesta por el mismo hermano mayor, el teniente, Manuel Recio Gallardo, la mayordoma primera, Concepción Rubio Picón, el prioste primero, Alejandro Alfonsín Garrido, y los hermanos Juan José Robles Segura, Gonzalo Fernández Ambel, Luis Vital Martín y Gonzalo Navarro Ambrojo, además de varios asesores que aunque no sean hermanos de la Paz, sí son profesionales que han de estudiar el proyecto con un mayor y mejor criterio.
El proyectista elegido fue el último cofrade citado, Gonzalo Navarro, quien integra como asesor artístico el equipo de trabajo del taller de los Sucesores de Caro. Al ser hermano de la propia corporación, es muy consciente del sentir de los miembros de esta hermandad, teniendo claro que el diseño debe beber de lo mejor que posee el palio actual, obra de Leopoldo Padilla en 1947, el cual ha sido fuente de inspiración para otros palios andaluces, como el de la Paz y Esperanza de Córdoba -cuya dolorosa fue coronada el pasado sábado 15 de octubre- o el de los Aceituneros de Utrera. Así pues, el palio seguirá siendo de figura y continuará transmitiendo blancura, será de malla para ser totalmente calado y con gran transparencia, se bordará en plata y su estilo continuará siendo el gótico florido para no alterar, en ese aspecto, el conjunto del paso de palio, de manera que aspire a la suntuosidad, a la riqueza y al refinamiento,
El proyecto, por lo tanto, ha sido concebido por Gonzalo Navarro como una reinterpretación de la obra existente, ya que mantiene y refuerza sus características propias, algo que habrá de tener muy en cuenta Manuel Solano, cuyo taller será el que borde esta obra en Morón de la Frontera. Así pues, cabe reseñar que las bambalinas destacarán por su clásico perfil interior polilobulado, en el que se incluirán ángeles, y por la sinuosa crestería, trazada siguiendo el esquema tradicional del estilo gótico florido. La delantera, además, presentará los escudos de España y del Cabildo Catedral en el paño central, rematado todo ello por una corona real cuyos imperiales se inspiran en la presea de la propia Virgen de la Paz, y en los paños laterales, se disponen tracerías que albergan elementos vegetales a modo de florones típicamente góticos. La bambalina trasera será similar, pero las heráldicas serán la de la ciudad y la de la Parroquia de San Sebastián. Con respecto a las bambalinas laterales, éstas seguirán el mismo diseño en los paños exteriores con decoración vegetal, mientras que en los paños centrales se representarán ángeles tenantes que portarán los escudos del papa Benedicto XV, que en 1917 introdujo en las letanías del rosario la invocación «Reina de la Paz», y del papa Pío XII, que gobernaba la Iglesia en el momento de la fundación de esta hermandad y que se distinguió por su labor por la paz durante la II Guerra Mundial.
Por último, el techo de palio se articulará mediante una cenefa perimetral de hojarasca, entrelazada en un cordón, inspirada en la actual pero con una mayor riqueza decorativa, pues se incluyen flores de distinto tipo. El elemento se estructura en torno a ocho cartelas en las que se propone un discurso iconográfico con la paz como elemento central. Ensalzando la figura de María como «Reina de la Paz», en las situadas en las esquinas se representará a cuatro reyes y reinas relacionados con el hecho pacificador: la Reina Esther, del Antiguo Testamento; San Fernando, patrón de Sevilla; San Luis Rey de Francia y Santa Isabel de Portugal, mientras que en las otras cuatro se representarán a santos cuya labor se centró en la consecución de la paz: San Francisco de Asís; Santa Catalina de Siena, San Juan XXIII y Santa Teresa de Calcuta. Y la gloria, por coherencia estilística con el gótico, se conformará mediante un trazado circular, a semejanza de las vidrieras de las catedrales góticas, con soporte de malla de plata en la que se representará la paloma de la paz, e irá rodeada por un delicado marco conformado de estrellas, a semejanza de la icónica gloria del palio actual.
