Glorias y Cofradías de la provincia

Nuestro Padre vuelve a Carmona

El domingo 14 de enero se celebrará una misa de acción de gracias tras la restauración realizada por Pedro Manzano y la imagen estará en veneración extraordinaria

Isidro González IsidroGonzez /
13 ene 2024 / 08:00 h - Actualizado: 13 ene 2024 / 08:00 h.
"Glorias y Cofradías de la provincia"
  • Nuestro Padre Jesús Nazareno de Carmona medio cuerpo.
    Nuestro Padre Jesús Nazareno de Carmona medio cuerpo.

La parroquia de San Bartolomé de Carmona acogerá este próximo domingo 14 de enero a las doce de la mañana una misa solemne en acción de gracias por la restauración a que ha sido sometida la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno durante los últimos ocho meses por el especialista Pedro Manzano Beltrán.

La celebración será presidida por el sacerdote D. José Ignacio Arias García, párroco y director espiritual de la Hermandad de Nuestro Padre, como es denominada en la localidad. En la misma intervendrá en la parte musical el tenor Eduardo Fernández acompañado de órgano.

Al término de la misma, la sagrada imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno permanecerá expuesta en el presbiterio de San Bartolomé a la veneración de los hermanos, fieles y devotos.

Nuestro Padre vuelve a Carmona
Cartel de la misa de acción de gracias tras la restauración que se celebrará el domingo 14 de enero en la parroquia de San Bartolomé de Carmona.

La intervención realizada por Pedro Manzano

Esta restauración ha sido posible gracias a la subvención concedida por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía para la conservación-restauración de bienes muebles del patrimonio histórico de carácter religioso en Andalucía, en la convocatoria correspondiente al año 2021, y que alcanza el 80% del coste de la intervención.

Como cuestiones de relevancia en esta restauración se ha abordado:

- Resanado de las grietas que presentaba la imagen (muy llamativa era la que presentaba el hombro derecho, que alcanzaba casi hasta la cintura).

- Recuperación de la magnífica encarnadura (posiblemente la original u otra algo posterior, ya del s. XVIII) que estaba oculta bajo numerosos repintes fruto de las intervenciones realizadas durante la segunda mitad del s. XX.

- Colocación de un sistema de sujeción de las potencias y otro para la corona de espinas.

- Mejora de la cogida de las manos, resolviéndose especialmente el encaje de la mano izquierda que dejaba ver una gran separación entre el antebrazo y la propia mano y que ahora queda totalmente desapercibida.

- Sustitución de la antigua peana, que no era la original y estaba muy deteriorada, por otra mayor de la misma la forma y aspecto general de la anterior. Se ha conseguido así una mayor estabilidad de la imagen y se ha podido sustituir el antiguo sistema de cogida al paso por otro más eficaz, que no perjudica a la talla.

La imagen del Nazareno de Carmona

La imagen de Jesús Nazareno es un referente devocional en Carmona, hasta tal punto que ha merecido ser distinguida por el Excmo. Ayuntamiento con la concesión de la Medalla de Oro de la Ciudad en 2007, honor que comparte únicamente con la imagen de la Santísima Virgen de Gracia, patrona de la localidad.

Pero al margen de su importancia religiosa, la talla de Jesús Nazareno es una obra artística de primer nivel, tal como se ha reconocido desde que su autoría fuera descubierta en 1929 por Miguel Bago Quintanilla.

Se trata de una obra documentada de Francisco de Ocampo realizada en 1607, que ha servido para la atribución –con mayor o menor fundamento- de otras, como, por ejemplo, las imágenes titulares de las sevillanas cofradías del Silencio y la Candelaria.

La imagen fue inicialmente concebida para portar la cruz “al revés”, es decir, con el stipes hacia delante, pero en 1698 se cambia esa iconografía y pasa a llevar la cruz con el stipes hacia atrás y acompañado por la figura de Simón Cirineo.

Los cambios de manos se han sucedido a lo largo de tres siglos, siendo las actuales obra de Antonio Illanes en 1941.

La Hermandad de los Nazarenos de Carmona

Los orígenes de la hermandad Nuestro Padre de Carmona se sitúan en distintos momentos del siglo XVI en la ermita de Nuestra Señora del Real, trasladándose el año 1600 a la parroquia de San Bartolomé, donde continúa desde entonces.

A finales del siglo XVI la hermandad ya disponía de reglas aprobadas y era conocida como Cofradía de los Nazarenos, como atestigua la carta de concierto de su primitiva imagen titular con el escultor Marcos de Cabrera, fechada en 1596.

El año siguiente, 1597, la hermandad adopta como propia la regla redactada por Mateo Alemán en 1578 para la Primitiva Hermandad de los Nazarenos de Sevilla. Desde entonces la relaciones con la Hermandad del Silencio de Sevilla han sido constantes.

En 1607 se produce el encargo de una nueva imagen de Jesús Nazareno al escultor Francisco de Ocampo, que sustituyó a la anterior.

En 1698 se introdujo un Cirineo, atribuido a José Felipe Duque Cornejo, lo que provocó el cambio de posición de la nueva cruz, ejecutada por Nuncio Onibense y Valentín Quarésima, platero y ebanista respectivamente, en carey y plata, que es la que porta actualmente.

En 1696 llega a Carmona la imagen de la Santísima Virgen de los Dolores, obra documentada de José Felipe Duque Cornejo, con encarnadura de Francisca Roldán, su mujer.

La devoción a la Virgen de los Dolores tuvo un gran auge en el siglo XVIII, dando lugar a la fundación de una Esclavitud propia para dar culto a la imagen de la Dolorosa.

La imagen de la Divina Pastora de las Almas, segunda de esta iconografía, fue regalada por el venerable fray Isidoro de Sevilla, hermano de la cofradía, en 1708.

En 1609 erige la capilla de su propiedad, contigua a la iglesia parroquial. En ella destacan tres magníficos retablos de mediados del s. XVIII. El principal está presidido por la venerada imagen de Jesús Nazareno y rematado por una Inmaculada, obra de Antonio Comas (2021), y los laterales por las de la Santísima Virgen de los Dolores y la Divina Pastora de las Almas.

Nuestro Padre vuelve a Carmona
El Nazareno de Carmona en su paso procesional estrenado en 2007, diseño de Juan Fernández Lacomba

La Estación de Penitencia en la noche del Viernes Santo

La hermandad realiza su estación de penitencia a la iglesia prioral de Santa María en la noche del Viernes Santo con los dos pasos de sus titulares, en absoluto silencio y con música de capilla, al modo y manera de la Hermandad del Silencio de Sevilla.

El Señor procesiona en un paso de madera y carey diseñado por el artista Juan Fernández Lacomba que fue estrenado en 2007, alumbrado con faroles de plata de Villarreal de 1997.

La imagen de Nuestra Señora de los Dolores lo hace en un paso de palio de diez varales con elementos (palio, varales, peana, media luna, corona) del siglo XVII y principios del XVIII, siendo el más antiguo de Andalucía. Luce manto negro bordado en oro por las hermanas Antúnez y reformado por Juan Manuel Rodríguez Ojeda, anteriormente de la Esperanza de Triana.

Es de destacar la belleza, el recogimiento y la unción religiosa que alcanza el recorrido de la cofradía por las calles del casco histórico de la ciudad de Carmona.