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Actualizado: 14 mar 2017 / 09:33 h.
  • C’s se suma ahora a la presión a Díaz para que deje la Junta
    Susana Díaz durante la firma en Huelva de un acuerdo con la Secretaría general Iberoamericana. / Julián Pérez (Efe)

El anuncio esperado de que la actual presidenta de la Junta, Susana Díaz, concurrirá a las primarias para liderar el PSOE provocó ayer que su socio de investidura, Ciudadanos (C’s), titubee en su discurso sobre la compatibilidad de ambos cargos. A primera hora de este lunes se sumó a las presiones del resto de la oposición para que Díaz deje el Gobierno andaluz y evite la «parálisis» a la que tiene sometida su gestión por estar centrada en su carrera política. Si el presidente del PP-A, Juan Manuel Moreno, pidió directamente a Díaz que dimita ya, el líder de Ciudadanos, Juan Marín, no fue tan lejos y abogó por un «revelo sosegado» en la Junta para el que, a diferencia de Moreno, defendió que se convoquen elecciones anticipadas.

Sin embargo, horas más tarde, Juan Marín publicó una serie de tuits en las que matizó sus palabras: «C’s cree que lo ideal sería agotar la legislatura y no adelantar elecciones. La legislatura hay que acabarla y ejecutar los proyectos con más rapidez y eficacia».

Tanto desde la Junta como desde el PSOE-A defienden que la Presidencia andaluza es «perfectamente compatible» con el liderazgo del partido que asumiría Díaz si vence en las primarias a Pedro Sánchez y Patxi López. Y la intención de la presidenta es mantener, en caso de alcanzar la Secretaría General del PSOE, ambos cargos el máximo tiempo posible. Hasta ahora, C’s era la única formación que no veía problema en este plan de la socialista pero una vez despejada la incógnita mantenida durante meses sobre los planes de Díaz (aunque el anuncio oficial será el 26 en Madrid en un acto al que la propia Díaz emplazó ayer tras rehusar hablar de cuestiones de partido), la formación naranja ha cambiado su discurso y se ha unido a las voces de PP, IU y Podemos que no ven compatible gobernar Andalucía y el PSOE. Además, Marín insistió en que con otra persona al frente de la Junta habrá que revisar el pacto de investidura suscrito por ambas formaciones tras las elecciones de 2015 y mostró su preferencia a que el nuevo presidente sea elegido en unos comicios adelantados y no un sucesor puesto a dedo por Díaz como su antecesor, José Antonio Griñán, la nombró a ella tras su dimisión acosado por la investigación judicial del caso ERE.

El cambio de discurso del líder naranja se produjo en un desayuno organizado por Europa Press en el que fue presentado por la portavoz de la Ejecutiva nacional de C’s, Inés Arrimadas. Un cambio tras el que las posiciones de la propia Arrimadas han tenido mucho que ver ante un Marín que hasta ayer insistía en no ver problema en que Díaz compatibilizara ambos cargos.

Mientras, el líder del PP andaluz, Juan Manuel Moreno, se mantuvo en el guion que lleva meses repitiendo tanto en sus actos de partido como en las interpelaciones que cada 15 días hace a la propia Díaz en el Parlamento andaluz. Un guion que tiene un punto débil: los cuatro años que la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, compatibilizó este cargo en el partido con la presidencia de Castilla La Mancha. Pese a ello, Moreno defendió ayer que «no existe ningún precedente» en España donde el número uno de un partido presida una comunidad, basándose en que en el PP el número uno es el presidente (Rajoy) y no el secretario general pese a que es quien ostenta el control orgánico de la formación.

El secretario de Organización del PSOE andaluz, Juan Cornejo, criticó tanto al líder del PP como al de IU, Antonio Maíllo, por opinar con «sandeces» sobre un proceso interno. El coordinador regional de IU anunció el domingo que su formación «impugnará» la posibilidad de que Díaz compatibilice la Junta con el liderazgo del PSOE si gana las primarias. Cornejo instó a Moreno e IU a «prepararse sus congresos» (los populares andaluces lo celebran este fin de semana y la coalición de izquierdas en junio) y «a rendir cuentas» de sus respectivos resultados electorales en los últimos comicios autonómicos que en ambos casos fueron «los peores de su historia». «Hay algunos partidos que no quieren ver ni en pintura a Susana Díaz porque gana elecciones y da estabilidad», defendió Cornejo, quien insistió en que Díaz «ha dicho claro que va a seguir siendo presidenta de la Junta y es compatible, pues eso es lo que hay». Ante el cambio de discurso de C’s, rehusó ser tan contundente y se limitó a defender la buena interlocución existente.