El fotógrafo Warren Richardson ganó hoy el World Press Photo, la máxima distinción del fotoperiodismo mundial, con una imagen en blanco y negro tomada en 2015 en la frontera entre Serbia y Hungría y que capta un bebé siendo pasado de un lado al otro de la valla mientras un hombre lo toma en sus manos.
«Estuve 4 ó 5 días y noches en la frontera, pero este momento fue muy rápido: los refugiados venían y venían», declaró el ganador durante la rueda de prensa, y añadió que no se dio cuenta de que lo que estaban pasando a través de la valla «era un bebé».
Richardson, que trabaja como freelancer, comentó que la foto nunca fue publicada.