Con la inauguración por el Rector Magnífico de la Universidad de Sevilla, Miguel Ángel Castro Arroyo; el Director de Relaciones Institucionales Andrés Luque Teruel; el Decano de la Facultad de Filología de la misma, Javier Martos Ramos; la Comisaria General del V Centenario de Elio Antonio por parte de la Junta de Andalucía, Lola Pons; en representación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC); Laura Giraudo; en representación del Alcalde de Lebrija José Benito Barroso y del Concejal de Cultura, Pepe Martínez: Encarni Fuentes, Delegada de Cultura del Excmo. Ayuntamiento de Lebrija y José Mª Calderón Llamas, Delegado del V Centenario de Elio Antonio en Lebrija; Rocío Ingelmo, como representante de la Fundación Altadis, y algunos descendientes del escultor sevillano José Lafita Díaz (1887-1945), el autor de la estatua, se concluye en el día de hoy, el solemne acto de colocación de la figura que representa al ilustre polígrafo, políglota, escritor, sabio y genial personalidad renacentista, incluyéndose entre los muchos actos que se vienen desarrollando para conocerlo y recordarlo -tanto en su localidad natal: Lebrija- como en diferentes ciudades españolas y extranjeras relacionadas con su biografía, incluida Sevilla.
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De izquierda a derecha junto a Elio Antonio: el Rector Miguel Ángel Castro Prieto, Laura Giraudo, Lola Pons y Luis Mendez. De derecha a izquierda: Javier Martos Ramos, Encarni Fuentes y Luis F. Montiel. FOTO: Facilitada por la US
Para esta ocasión, importante en los Anales de la Universidad Hispalense y emotiva para la familia del escultor -pues ciertamente Elio Antonio está donde deber estar, al ser el Primer Gramático de nuestro país y por extensión de todos los hispanohablantes- han debido coordinarse además de los anteriores, una gran serie de personas que son también protagonistas de esta operación, para que todo estuviera a punto, incluidos todos los trámites que se necesitan por parte de la “US”, el Ayuntamiento, Cultura y Patrimonio de la Junta de Andalucía, etc.
Por ello destaco la participación de la Jefa de Servicio de Patrimonio de la Universidad de Sevilla, Carmen Santiago; del Director de Relaciones Institucionales, Andrés Luque Teruel, el Vicedecano de Infraestructuras, Isidro Pliego; el Director del Centro de Iniciativas Culturales (CICUS) Luis R. Méndez Rodríguez; el Director de Patrimonio del mismo, Luis F. Martínez Montiel; el jefe de Comunicación Pablo Nieves, así como la Directora del mismo Carmen Otero Alvarado y todo el personal que compone tanto el Decanato de Filología Hispánica como los que integran secretarías, administraciones e instituciones que componen las diferentes funciones académicas, docentes y expositivas .
Antes de llegar a la entrada de la Facultad de Filología, donde felizmente se encuentra ya la figura en escayola patinada en tonalidades que pueden recordar a la madera, el hierro oxidado e incluso para algunos el chocolate, esta debió hacer un largo peregrinaje en el espacio y en el tiempo.
En primer lugar, y aunque el encargo se le hace dos años antes, no será hasta fines de 1944, cuando esta figura monumental, salió del Patio de Banderas 1, donde tenía situada la casa-taller el escultor, para ir a la Fundición Ferrero, de Madrid, donde se vació a la cera perdida, y posteriormente regresando a Sevilla este vaciado junto a la obra fundida, en mayo de 1946.
La de bronce, partirá desde Sevilla a su destino en Lebrija, donde se coloca sobre el pedestal de piedras y mármoles diseñado también por José Lafita Díaz, en un lateral de la plaza de España, lugar en el que se decide situar por haberse encontrado restos romanos en el centro de la misma.
La obra en cuestión, forma parte pues del monumento dedicado a Elio Antonio de Nebrija –o de Lebrija, según considera uno de los mejores conocedores de sus obras, el Catedrático jubilado y latinista D. Juan Gil- fue encargada con motivo del V Centenario del Nacimiento, por la entonces Corporación municipal lebricense presidida por su alcalde José Álvarez Aguilar, los concejales, la Junta Nacional que se crea al efecto, integrada entre otros miembros por José Cortines Pacheco, José Bellido Ahumada, el escritor Manuel Halcón Villalón-Daóiz y el Secretario del Ministro de Enseñanzas Medias, Luis Ortiz Muñoz.
Al monumento, que en su ubicación en la bellísima localidad sevillana alcanza los 5,50 m. de altura, se le ha añadido este año en su base una inscripción simbólica ya que en el actual, conmemoramos el V Centenario de la muerte del “Padre de la Gramática y del Humanismo Español” por todas las innovaciones, aportaciones y rigurosos y análisis que hizo en las numerosas ciencias que fueron objeto de sus estudios.
En cuanto a la “biografía” de la imagen de escayola a escala 1:1 o escala real, una vez llegada a Sevilla, se instaló en la Escuela de Estudios Hispano-Americanos, dependiente del CSISC, desde el mismo mes de mayo del 46 en que regresa con la de bronce, donde ha permanecido hasta ahora. 76 años de “vida” donde estuvo aunque siendo bastante desconocida incluso para los sevillanos, pues no constaba su autoría como ahora se hace, y el lugar, también era poco transitado salvo por hispanistas e investigadores, circunstancia esta que no podrá continuar realizándose, ya que el Instituto de Estudios Hispano-Americanos cierra sus puertas aquí, para marcharse a Madrid. Otra nueva Institución, que se nos va de Sevilla, que pierde la ciudad.
Pero para que pueda verse la figura magistral de Elio Antonio en su nueva casa, días pasados se procedió a su traslado para el que se necesitaron grúas especiales dado su peso –entre 700 y 800 K.- dos camiones de transportes de la empresa Amado Miguel, y un equipo de montaje dirigido por Otto Pardo, dadas las dificultades de peso, altura, la estrechez de algunas de las calles por donde debía pasar, y las características tan delicadas del material. Previamente a la procesión, tuvo un itinerario bastante intrincado hasta llegar a la Avda. de Palos de la Frontera, y dos estaciones –una lo llevó hasta Santiponce y de nuevo a Sevilla- donde se había procedido ya a las labores de limpieza y restauración, realizadas por Marta Pertejo.
Somos muchos millones –de momento sólo en el planeta Tierra- los que conformamos la Cofradía o Hermandad Universal de Elio Antonio de Nebrija. Para empezar, todos los hispano-hablantes o cualquiera que haya tenido en sus manos o consultado por internet, cualquier Diccionario de Gramática española, por no hablar de los de Latín, o cualquiera otro de los que escribiera el ilustre personaje que se integra en la importante Colección de la Gipsoteca Universitaria.