El mejor del Betis, una vez más, fue Dani Ceballos. El utrerano tardó en aparecer, aproximadamente 20 minutos, pero en cuanto encontró su sitio cargó con gran parte del juego ofensivo de su equipo e inauguró un recital de regates, controles y pases que acabaron induciendo al Villamarín a corear su nombre después de que marcase. El tanto, por cierto, fue de muy bella factura. Y todo eso ocurrió delante de un conjunto que va detrás de sus pasos desde hace tiempo y que está dispuesto a pagar los 15 millones de su cláusula de rescisión. «Tengo tres años de contrato. Mi futuro está aquí», dijo tras el partido. Diego Simeone, por cierto, lo elogió sin tapujos en la sala de prensa. «Es un jugador fantástico que puede jugar en cualquier posición con una visión de juego muy buena. Es peligroso cuando tiene espacios para poder ver», dijo el técnico colchonero.