El Gol Sur ya está casi listo para ser demolido por un ‘diplodocus’, la gran máquina que se encargará de echarlo abajo la próxima semana. El Betis sigue ultimando los detalles para acabar con uno de los graderíos más antiguos del estadio Benito Villamarín y ya ha quitado todos los asientos que había en esa parte del estadio. Ahora están apilados y, obviamente, acabarán siendo retirados para que la demolición no se los lleve por delante, ya que algunos podrán ser reutilizados.
La imagen que ofrece el Gol Sur, según las fotografías que ha divulgado el Betis a través de su web, sería desalentadora si no fuese por la razón por la que está así, que no es otra que la construcción de un nuevo graderío según el proyecto que en su día diseñó Antonio González Cordón, que también está supervisando esta nueva fase de la obra.
