Rubén Castro quiere olvidar esa maldición que lo persigue cuando se enfrenta al Real Madrid. Son ya once partidos sin marcarle un solo gol desde la primera y última vez que lo logró, en 2001 con Las Palmas. Pero hay más rachas que quiere cortar de raíz cuanto antes: el canario tampoco ha marcado en el Villamarín en esta Liga, ya que sus cuatro goles han sido fuera de casa (dos en el Camp Nou y dos en Mestalla), y además lleva cuatro jornadas en blanco (Granada, Sevilla, Real Sociedad y Málaga).
La cara opuesta se llama Karim Benzema. Más allá de Cristiano Ronaldo (tres goles en cuatro visitas al Villamarín), el francés es el verdadero peligro para el Betis, ya que ha marcado en sus cinco últimos partidos contra los verdiblancos: en la 2012-13 hizo el 2-1 en el 3-1 del Bernabéu; en la 2013-14, el 1-1 allí (2-1) y el 0-3 aquí (0-5); y la pasada temporada, el 3-0 en Madrid (5-0) y el 1-1 definitivo en Heliópolis.