Tras la cuesta abajo de diciembre, económicamente hablando, el mes de enero se presenta todos los años con un gran reto a superar tras haber gastado buena parte de los ahorros, si los hubiera, en comidas de Navidad con los amigos, familiares, compañeros de trabajo, etc, así como en los habituales regalos tanto de Papá Noel como de Reyes Magos.
Además de las apreturas que llegarán este mes en la economía doméstica, pues el mes de enero suele una época en la que habitualmente suben los precios de todo, o de casi todo. A primeros de año pocas cosas son las que bajan de precio, aunque afortunadamente el euríbor sigue a la baja y al menos dará un nuevo respiro a la cuota de la hipoteca a quienes les toca ahora la revisión de su cuota mensual.
De momento, desde el pasado 1 de enero ya cuesta algo más a los españoles algunos servicios –unos básicos y otros menos básicos– como la energía, el ferrocarril o los sellos, por citar algunos. El gas, por ejemplo, ha sufrido un aumento del 3,5 por ciento respecto al precio del trimestre anterior, y es por lo tanto una segunda subida consecutiva. Este aumento atiende al incremento de la materia prima, cuyo precio ha subido un 13,7 por ciento. Antes de que terminara 2016, la bombona de butano aumento su tarifa un 4,7 por ciento el pasado mes de noviembre y hasta el tercer martes de este mes de enero no se revisará de nuevo su previo. Hoy día, el precio de la bombona de butano es de 12,28 euros.
El precio de la luz, por su parte, se mantendrá congelado para este año pero únicamente la parte regulada por el Gobierno ya que depende de cómo se comporte el mercado mayorista sí puede afectar de forma directa a la factura.
Las telecomunicaciones, que suelen ser otro de los gastos fijos de la casa, también sufren variaciones en sus precios. Telefónica, aunque ha optado por no aumentar su cuota de abono por cuarto año consecutivo –17,40 euros–, sí anuncia una subida de la cuota fija de algunos de sus paquetes de Fusión –oferta que combina internet con telefonía fija, móvil y televisión– el próximo mes de febrero de cinco euros. Aunque los precios de esta plataforma eran fijos «y para siempre», es la cuarta subida que sufren sus abonados. El resto de compañías de momento no han anunciado subidas aunque no se descarta que ofrezcan más servicios a cambio de una subida en la cuota.
También tendrá un precio más elevado mandar una carta o un paquete a través de Correos. La media del alza es del 9,5 por ciento y aumenta el envío de una carta de hasta 20 gramos a cualquier punto del país en cinco céntimos de euro, por lo que la nueva tarifa queda fijada en 50 céntimos. Esta subida, la mayor de la última década, también fija en 1,25 euros este mismo envío para el continente europeo y de 1,35 euros para cualquier otro lugar del mundo.
Los carburantes, por su parte, no han sufrido un aumento de precio en lo que va de año pero según los datos facilitados por el Ministerio de Energía, la gasolina cuesta un nueve por ciento más que hace 12 meses mientras que los conductores de vehículos diesel han sufrido un aumento del combustible de 16 por ciento.
Los consumidores también tendrán que rascarse un poco más el bolsillo a la hora de comprar alcohol, comprar tabaco y también si desean comprar bebidas azucaradas. El Gobierno consideró que aumentar los impuestos de los refrescos servirá para luchar contra la obesidad.