El Grupo Gabriel Rojas es el resultado del trabajo que varias generaciones han realizado en esta empresa familiar. La empresa fue fundada por D. Gabriel Rojas Sousa y refundada en 1952 por su hijo D. Gabriel Rojas Fernández. El actual presidente del grupo empresarial contesta nuestro cuestionario.
¿La soledad del empresario se acrecienta en situaciones como la que se está viviendo actualmente? «Por supuesto que sí. Te ves obligado a tomar decisiones en las que arriesgas mucho y es difícil apoyarte y asesorarte en otras personas o instituciones, pues realmente, ante esta inédita situación, nadie sabe nada de lo que va a pasar. Y si miramos al Gobierno, que debería ser nuestro principal referente, y vemos los errores y cambios de rumbos que está llevando a cabo, te quedas con un sentimiento que no es precisamente tranquilizador».
¿Es este el escenario más duro con el que se puede de enfrentar un empresario? ¿Es la incertidumbre el peor enemigo de un empresario? «Existe una tremenda incertidumbre, y eso es lo peor a la hora de tomar decisiones. Y para muchos sectores, como los relacionados con el turismo, no puede haber un escenario peor que el de una larga temporada con ingresos cero. Esta situación era impensable».
¿Qué dibujo de podría hacer de la situación de las empresas a corto plazo? «A corto plazo creo que la mayoría de las empresas están tomando decisiones acertadas: reducción de costes, ERTES, aseguramiento de la tesorería, refinanciación. Yo el problema lo veo a medio plazo, cuando después de haber implementado estas medidas tácticas, la crisis haga que el negocio no funcione, que ya no sea rentable».
Los españoles, a pesar de todo, han decidido remar en la misma dirección sumando esfuerzos y sin fisuras ¿Llega un mundo nuevo? «La pandemia del Coronavirus va a quedar en los anales de la Historia Universal. Creo firmemente que va a haber un antes y un después en muchos ámbitos, que va a cambiar la sociedad mundial y, por ende, todas las relaciones económicas: el teletrabajo a sobrevenido para quedarse, la conciencia de la seguridad sanitaria colectiva, la forma de hacer turismo, las grandes concentraciones en espectáculos, deportivas, festivas e incluso profesionales, el cambio de conciencia sobre las condiciones de habitabilidad de tu hogar, etc. Creo que se van a producir muchas transformaciones en la sociedad que van a afectar a las relaciones económicas. Si siempre se ha considerado la capacidad de adaptación a los cambios por parte de una empresa como algo necesario, ahora va a ser imprescindible».