La grave lesión de Carlos Fernández, baja entre seis y ocho meses, da al Sevilla la posibilidad de fichar a un jugador para cubrir el puesto del canterano. Sin embargo, los requisitos hacen que el club no haya tomado todavía una decisión al respecto. Los técnicos saben que quedarse con tan sólo dos delanteros no es lo mejor, pero quieren analizar bien todo.
Para empezar, el Sevilla tiene que dirigirse al tribunal médico de la Liga comunicando su deseo de dar de baja a Carlos, tras lo cual debería esperar la decisión del citado tribunal, que es quien debe autorizar la sustitución del jugador lesionado de gravedad. En caso de recibir el OK, el Sevilla podría fichar, aunque el futbolista que eligiese debe cumplir los siguientes requisitos: ser menor de 23 años –Carlos tiene ficha del filial– y no necesitar tránsfer internacional.
La pregunta es: ¿hay delanteros de ese perfil asequibles y con capacidad para rendir en un equipo como el Sevilla? La respuesta no parece clara, de ahí que los técnicos se lo piensen. La otra opción es esperar al mercado de invierno. Queda lejos éste, pero el buen momento del equipo evita urfencias. En cualquier caso, la decisión no se demorará.