El último fin de semana de enero dejará menos nieve, tan sólo en las cordilleras del norte, pero el ambiente gélido persistirá con heladas generalizadas, que en el interior peninsular no concederán tregua, y con mínimas de hasta 10 grados bajo cero o menos en el Pirineo.
Lo más destacado de los próximos días será el tiempo frío, seco y anticiclónico, salvo en Los Pirineos, Cantábrico y en puntos del área mediterránea y de Baleares, donde puede haber precipitaciones débiles y aisladas con nevadas a partir de unos 400-500 metros, más significativas en la cordillera Cantábrica.
Rubén del Campo, portavoz de Aemet, ha explicado que respecto a las temperaturas, por la noche las heladas serán generalizadas en el interior peninsular, mientras que por el día se prevé un ambiente también muy frío con valores entre 3 y 5 grados, e incluso 5 y 10 grados por debajo de lo normal para esta época del año.
Para este viernes, el portavoz ha alertado de las nevadas en el norte peninsular en cotas bajas a partir de unos 400 o 500 metros, y que pueden dificultar la movilidad en vías importantes, sobre todo en Navarra, País Vasco y en el norte y este de Castilla y León además de en el entorno del sistema Central, entre Madrid y Segovia.
El domingo, en concreto, se espera una «madrugada muy fría», con mínimas entre 2 y 4 grados bajo cero en buena parte del interior del norte y este de la Península, aunque en entornos montañosos las heladas serán más fuertes y se podrán alcanzar 8-10 grados bajo cero.
Además durante el fin de semana, el frío se verá incrementado por los vientos del norte que soplarán con fuerza en los tercios norte y este de la Península y también en Baleares.
La próxima semana, a caballo entre enero y febrero, continuará fría, seca y anticiclónica, aunque a partir del lunes las temperaturas iniciarán un «progresivo ascenso» con heladas nocturnas en el interior peninsular, cada vez menos extensas e intensas y sobre todo con un ambiente algo menos frío.
En las horas centrales del día se empezarán a registrar valores cada vez más altos, más cercanos ya al promedio normal y, de cara al miércoles o jueves, se superarán los 10 grados en el norte y los 14 o 16 grados en el centro y sur, incluso 18 grados en puntos del Mediterráneo y del Valle del Guadalquivir.
Las precipitaciones serán escasas durante los primeros días, aunque alguna lluvia débil y dispersa podría caer en el Cantábrico y alto Ebro con alguna nevada, también en Los Pirineos, sin descartar alguna precipitación débil y aislada también en el sur de Andalucía.
Del Campo ha pronosticado que febrero -comienza el próximo miércoles-, se presenta frío en su primera semana y con temperaturas por encima de lo normal en el este peninsular y archipiélagos; respecto a las precipitaciones no hay una tendencia demasiado clara.
Dicho mes suele ser el tercero más frío del año, tras enero y diciembre, con una temperatura media de 7 grados y con menos precipitación que los otros dos meses invernales, diciembre y enero, aunque, eso sí, suele llover algo más que en marzo.