La Dirección General de Tráfico (DGT) espera 16 millones de desplazamientos por las carreteras españolas entre este viernes 31 de marzo y el próximo lunes 10 de abril, por lo que ha hecho un llamamiento a la prudencia en la conducción, dado que este mismo período de 2022 se saldó con 27 muertes.
Para regular esos viajes, la DGT tiene diseñado un dispositivo que se pondrá en marcha a las tres de la tarde del Viernes de Dolores y concluirá el Lunes de Pascua, 10 de abril, festivo en Baleares, Cataluña, Comunidad Valenciana, La Rioja, Navarra y País Vasco.
Recuerda Tráfico que este periodo vacacional es uno de los más complicados del año, al aumentar el volumen de desplazamientos en un corto espacio de tiempo, con orígenes y destinos similares los mismos días y horas.
Como es habitual, la operación se desarrollará en dos fases. La primera comienza este viernes a las 15.00 horas y finaliza la medianoche del domingo 2 de abril, periodo en el que se prevén 4,3 millones de movimientos por carretera.
La segunda fase, más importante que la anterior por volumen de desplazamientos a lo largo de toda la red viaria, comenzará a partir del miércoles 5 de abril y finalizará el lunes 10.
Tráfico señala como horas más conflictivas para la circulación entre las 15.00 y las 22.00 horas de este viernes y, en ese intervalo, entre las 18.00 y las 21.00 horas.
Horas en las que podrán producirse problemas de circulación y retenciones en las salidas de las grandes ciudades, además de en los accesos a zonas turísticas de costa al coincidir los desplazamientos de largo recorrido por el comienzo del periodo vacacional con los movimientos cortos habituales de fin de semana.
El sábado por la mañana continuará el tráfico intenso de salida de los grandes núcleos urbanos (entre las 9.00 y las 14.00 horas), mientras que los que retornen el domingo día 2 de abril podrán encontrar retenciones por la tarde-noche (especialmente entre las 18.00 y las 22.00 horas) en los accesos a las ciudades, aunque de menor intensidad que otros domingos.
Para garantizar la seguridad y la fluidez en las carreteras, la DGT cuenta con la máxima disponibilidad de los medios técnicos (radares fijos y móviles de control de velocidad, helicópteros y drones, además de cámaras y furgonetas camufladas para el control del uso del móvil y del cinturón de seguridad) y humanos.