Actualizado: 31 dic 2020 / 13:30
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La Covid-19 ha dado un vuelco a nuestra vida cotidiana, desde nuestra manera de comprar hasta las costumbres de aseo y limpieza. Ahora, lavarse las manos de manera frecuente, llevar gel antibacterial en el bolso y limpiar todo cuanto tocamos se han convertido en tareas cotidianas. Pero más allá de estos nuevos hábitos, los cambios han llegado hasta nuestras casas.
Extremar la limpieza del hogar ha sido una constante durante los últimos meses, por ello, te damos algunas recomendaciones para mantenerlo limpio y desinfectado, mejorando la calidad de vida y evitando, en la medida de lo posible, la propagación de la Covid.
Tiempo de limpieza a fondo
Es necesario dedicar un tiempo para limpiar de forma exhaustiva aquellas áreas del hogar que se lavan con menos frecuencia. Armarios, trasteros, cocina y baños son ejemplo de esos espacios que requieren un extra de atención. Aunque es posible hacerlo por cuenta propia, puede resultar más conveniente contratar servicios profesionales como los de Hogami y dejar la labor en manos de especialistas. Pero si prefieres ocuparte tú, te damos algunos consejos para que esta tarea resulte más sencilla:
● Reserva un día. Una limpieza a fondo toma su tiempo y es preferible no ir con prisa.
● Despeja el área que se vaya a limpiar. Es mucho más fácil llegar a todos los rincones si la habitación está vacía, así que, a ser posible, saca todos los muebles y pertenencias.
● Descarta todo lo que no uses. Las jornadas de limpieza a fondo son ideales para deshacerse de aquellas cosas en desuso que solo ocupan sitio y almacenan polvo. Si lo haces, al poner de nuevo todo en su lugar verás como ganas en espacio y amplitud.
Básicos de la higiene diaria en el hogar
Más allá de las limpiezas a fondo, el mantenimiento de la casa es más necesario que nunca. Revisa los elementos que deben limpiarse a diario para dejar al virus fuera del hogar.
Suelo y superficies
El suelo y muebles como mesas, aparadores y escritorios deben limpiarse a diario, poniendo especial cuidado en las superficies donde se coloca la comida y los elementos de aseo personal. De igual forma, es buena idea repasar con un producto de al menos 65% de alcohol o una solución a base de lejía. Con esto te aseguras de eliminar la mayoría de gérmenes, virus y bacterias.
Objetos de uso frecuente
Móvil, ordenador, pomos y pasamanos, llaves, grifos y hasta el asa de la nevera son un ejemplo de esos objetos con los que se tiene contacto constante. En muchos casos no es posible lavarlos con agua y detergente, por lo que el aerosol o las toallitas desinfectantes son una opción práctica y fácil para tener a mano y usar con frecuencia.
Ropa y calzado
Al volver a casa después de estar en contacto con otras personas, es recomendable cambiarse de ropa, ponerse prendas limpias y cómodas, y lavar la sucia tan pronto como sea posible. Evita sacudir la ropa, ya que esto podría esparcir suciedad en el ambiente y usa, si el tejido lo permite, agua caliente. También es recomendable enjuagar las suelas de los zapatos antes de entrar, o dejarlos fuera hasta que puedas desinfectarlos.
Alimentos
Cuando vuelvas de hacer la compra, asegúrate de limpiar muy bien todos los alimentos. Si se trata de frutas y verduras, colócalos un par de minutos bajo el agua del grifo y sumérgelos en agua de limón o vinagre. Luego ponlos sobre papel de cocina hasta que se sequen. En el caso de los víveres que vengan en latas, cajas o paquetes, puedes echar mano de toallitas o un paño con desinfectante y dejar fuera unos minutos antes de guardarlos.
La limpieza del hogar siempre ha sido un asunto que atender, pero en las circunstancias actuales se ha vuelto todavía más importante. No en vano la principal medida para prevenir la propagación del virus es mantener una higiene adecuada, y como cualquier otra cosa, esto empieza en casa.
