No se han hecho esperar las primeras reacciones al plan de la Madrugá presentado este miércoles a los hermanos mayores en una reunión en el Consejo de Cofradías y cuya piedra angular , como avanzó ayer este periódico, es el adelanto de la hermandad del Calvario al segundo puesto de la nómina, entre El Silencio y el Gran Poder.
El hermano mayor del Gran Poder, Félix Ríos, en declaraciones a este periódico, ha asegurado que su hermandad no admitirá realizar «rodeos adicionales» en su itinerario, por lo que «en ningún caso tiraremos por Santo Tomás y Tomás de Ybarra», como sugiere el llamado plan Nieto. Y añade que «con la hermandad del Calvario por delante, no podríamos ni sacar la cofradía de la Catedral», debido a su inferior ritmo de paso.
En concreto, a los de San Lorenzo se les pide que en su regreso por la zona del Postigo o bien ralenticen su marcha para adecuarse al ritmo de la hermandad del Calvario, cuya estela seguirían hasta la calle Zaragoza, o bien que amplíen el rodeo que ya realizan por la plaza del Triunfo y continúen por la calle Santo Tomás y Tomás de Ybarra. Con esta ampliación de su itinerario, la Cruz de Guía del Gran Poder no alcanzaría al Calvario hasta la calle Zaragoza.
Ríos ha definido el plan Nieto como «una tomadura de pelo» y reclama un proyecto de remodelación de la Madrugá en el que «los esfuerzos que se les pida a las hermandades sean equilibrados, proporcionales y equitativos», algo que a su juicio «brilla por su ausencia» con el plan Nieto.
El máximo responsable de la hermandad del Gran Poder recuerda que su cofradía lleva ya medio siglo «sacrificándose» con un itinerario de regreso a su templo que no es el natural, pese a lo cual asume, y que, con el paso de los años, se ha visto dificultado aún más con el polémico cruce con la Esperanza de Triana en la calle Zaragoza.
Félix Ríos desea aclarar que él no se opuso en ningún momento a que se trasladase la información del plan Nieto a la prensa. «Es más, pedí que no sólo se trasladase el plan sino el resultado de las conversaciones y ahí fue cuando, tras producirse intervenciones en uno y otros sentido, fue el Consejo el que decidió no dar información alguna».
