Facebook Twitter WhatsApp Linkedin
Actualizado: 30 may 2023 / 17:42 h.
  • Nuestra Señora de la Soledad, Patrona de Cantillana (Foto: Hermandad de la Soledad de Cantillana)
    Nuestra Señora de la Soledad, Patrona de Cantillana (Foto: Hermandad de la Soledad de Cantillana)

Cuando falta menos de un año para su coronación canónica, la Patrona de Cantillana, Nuestra Señora de la Soledad, será retirada del culto para ser sometida a un proceso de restauración. Durante unos meses la Virgen no presidirá su camarín – aunque seguirá estando en su pueblo y en su templo – para volver con su esplendor recuperado y con una apariencia aún más cercana a como fue concebida.

Según ha anunciado la hermandad de la Soledad, la celebración semanal de la Santa Misa y el posterior rezo de la sabatina se dedicarán como despedida de la Virgen. El oficio religioso dará comienzo a las 20.00 horas, y será la última oportunidad de ver a la dolorosa hasta después del verano. A su finalización, la Virgen será retirada del culto para ser restaurada, aunque permanecerá dentro del templo.

La dolorosa no saldrá del pueblo ni de su santuario

Para la restauración la Patrona cantillanera no saldrá de su santuario, ya que esta se llevará a cabo en las dependencias del mismo, propias de la hermandad de la Soledad. Las labores de remozado de la imagen serán realizadas por Eduardo Martínez Pérez, artista plástico, perito judicial en arte y antigüedades y restaurador de bienes culturales, tal y como fue aprobado por los soleanos en el cabildo extraordinario celebrado el pasado día 6 de mayo.

La Soledad de Cantillana será retirada del culto este sábado para su restauración
Foto anterior a los años 60 del siglo XX, en la que la Virgen de la Soledad conserva las manos primitivas, que serán recuperadas (Foto: Hermandad de la Soledad de Cantillana)

La dolorosa mantiene los rasgos y características estéticas originarios, por lo que su apariencia es prácticamente se mantiene tal y como fue concebida. Por tanto, la actuación sobre la imagen se centrará en la actuación sobre los estragos del tiempo y del culto, así como la eliminación de añadidos de épocas posteriores.

La hermandad conserva las manos primitivas, que serán repuestas

En este sentido, en el proceso de restauración de la imagen – que se dilatará según las previsiones por espacio de dos meses – destaca la reposición de las manos originales de la talla. Estas fueron repintadas por Castillo Lastrucci en los años 50 del siglo XX tras el “grave deterioro” a causa de “un aguacero durante la procesión del Viernes Santo”, según detalla la hermandad. Posteriormente fueron retiradas y sustituidas por unas – de posición muy similar – talladas por Sebastián Santos en 1960. A pesar del cambio, la hermandad siguió conservando las manos primitivas, por lo que ahora podrán ser de nuevo incorporadas a la talla.

La Soledad de Cantillana será retirada del culto este sábado para su restauración

La Virgen de la Soledad será restaurada en su santuario, que ya aparece engalanado anunciando la próxima coronación canónica de la dolorosa (Foto: Hermandad de la Soledad de Cantillana)

Del mismo modo, la dolorosa recuperará la policromía original, conservada “prácticamente en su totalidad” y que, según los estudios realizados antes de la intervención, además de su antigüedad destaca “la especial técnica empleada”. La intervención abarcará también la reparación de la grieta que la imagen presenta en el rostro, la eliminación de repintes y de elementos metálicos.

La Patrona de Cantillana será coronada canónicamente el 25 de mayo de 2024

La Virgen de la Soledad de Cantillana pasa por ser una de las dolorosas documentadas más antigua de la Archidiócesis de Sevilla, pues su hechura fue contratada – junto con la imagen del Cristo Yacente, un Resucitado actualmente desaparecido, un sepulcro y cinco ángeles – con Juan de Santamaría, un escultor prácticamente desconocido – en 1583.

La Patrona y Alcaldesa Perpetua de Cantillana será coronada canónicamente el 25 de mayo de 2024. El pasado jueves, y cuando faltaba exactamente un año para este esperado momento, la hermandad conmemoró con una misa el cuarto aniversario de la dedicación del templo, ofreciendo a la Virgen el oro donado por los cantillaneros para enriquecer la corona con la que será coronada por el Arzobispo de Sevilla. Es esta una presea icónica de la dolorosa, labrada por Manuel Palomino en la primera mitad del siglo XIX y que será engrandecida con las donaciones de los devotos por el joyero cordobés Manuel Valera.