Image
Actualizado: 22 feb 2021 / 05:00 h.
Facebook Twitter WhatsApp Linkedin Copiar la URL
Enlace copiado
  • Aforamientos

Ahora que no tenemos pasos por las calles y que no hablamos de si queremos un Martes Santo al revés o al derecho, de la pescadilla que se muerde la cola, pero nunca llega a hacerlo, en la Madrugá, de la marcha cani que han interpretado en la Campana o del excesivo exorno floral de tal palio, es cuando nos damos cuenta de lo mucho que lo echamos de menos.

Nos hemos llevado tanto tiempo hablando de nimiedades que hemos olvidado su significado.

Han pretendido convertir en formal una fiesta que siempre fue popular. Esa era la clave de la Semana Santa, que era del pueblo y el pueblo sabía organizarse a la perfección

En un tiempo no muy lejano, las vallas estaban en las obras y los aforamientos eran cosa de los políticos.

Lo cierto y verdad es que no se imaginan ustedes de las ganas que tengo de encontrarme una calle cerrada a cal y canto con los señores de Protección Civil diciéndome eso de «por aquí no se puede pasar».